.- NOVELISTAS: Rosa Chacel,
Arturo Barea, Max Aub, Francisco Ayala, Benjamín Jarnés, E. Salazar Chapela, S.
Serrano Poncela, Ramón J. Sénder, Manuel Andujar.
.- CRÍTICOS LITERARIOS:
Francisco García Lorca, Claudio Guillén, J.F. Cirre, Ricardo Gullón, Juan de la Encina , José López-Rey,
Ramón Xirau, C. Blanco Aguinaga, Aurora de Albornoz, Manuel Durán, Tomás
Segovia.
.- EDUCADORES Y PEDAGOGOS:
José Castillejo, Alberto Jiménez Fraud, Lorenzo Luzuriaga, Joaquín Xirau.
.- JURISTAS Y AFINES: L.
Recasens Siches, L, Jiménez de Asúa, Fernando de los Ríos, Manuel López-Rey,
Francisco Ayala, Gabriel Franco, Luis Araquistain, J. Medina Echavarría.
.- CIENTÍFICOS (en general):
Ignacio Bolívar, Blas Cabrera, Arturo Duperier, Augusto Pi Sunyer, José Trueta,
Odón de Buen, Pío del Río Hortega, Ángel Garma, Severo Ochoa, Juan Comas, E.
Mira y López, J. Gallego Díaz,
.- DRAMATURGOS: Alejandro
Casona, Jacinto Grau.
.- MÚSICO: el mundialmente
famoso Pablo Casal.
Y, aunque la lista no sea
completa, podemos sacar una ligera idea de la importancia humana e intelectual
de los huidos o exiliados.
Uno puede imaginarse el
panorama intelectual y científico de España con ellos aquí y el desierto que
quedó sin ellos aquí.
Pero una cosa es cierta,
ellos estaban cambiando el ambiente cultural e intelectual de España, lo que
quedó truncado.
Para saber su labor en los
países de acogida habría que preguntárselo a esos países, que son los que
tuvieron que notar el cambio.
Desde Madrid se exilian a
México los filósofos José Gaos, Luis Recasens Siches, María Zambrano y José
Gallegos Rocafull, que eran profesores durante la República en la Sección de Filosofía de la Facultad de Filosofía y
Letras de Madrid.
La que, tras un período en
México, enseñando en la Casa
de España y, luego, en la
Universidad de
Morelia, la malagueña María Zambrano, pasó a Cuba, donde residió diez años,
volviendo posteriormente a Europa, en 1953, primero en Roma y después en “La Pièce ”, en Los Bosgos
franceses.
De Madrid también se
exiliaron muchos Profesores de Instituto.
Desde Valencia se exilió
Joaquín Álvarez Pastor, que fue profesor del Instituto Luis Vives.
Desde Barcelona también se
exiliaron a México los profesores Jaime Serra Hunter, Joaquín Xirau, Juan Roura-Parella
(posteriormente a E.E.U.U) y Eduardo Nicol (Director del Seminario de
Metafísica de la Facultad
de Filosofía y Letras.
Todos ellos, además de
publicar obras originales, fueron traductores de filósofos de talla mundial.
A Venezuela se exilió otro
catalán, Domingo Casanovas, fundador de la Facultad de Filosofía y Letras en la Universidad
venezolana, junto con Eugenio Imaz, García Bacca y otros profesores
venezolanos.
También recalaron en
Venezuela Bartolomé Oliver y Guillermo Pérez Enciso, Manuel García Pelayo,
Federico Riu y Juan A. Nuño.
En Quito (Ecuador) se exilió,
desde Barcelona, Juan David García Bacca, que después pasaría a la Universidad de México
y, finalmente, a Caracas (Venezuela)
En La Habana (Cuba) recaló José
Ferrater Mora, que luego pasaría a Chile y, finalmente, a E.E.U.U.
Además, habría que tener en
cuenta a los hijos de estos exiliados, que han seguido los pasos de los padres,
que salieron adolescentes o jóvenes y han fructificado en los países de
acogida.
Ortega y Gasset estuvo en
Argentina desde el 39 al 42, volviendo, luego a España.
García Morente, primero
republicano, que luego se ve obligado a huir por la persecución de los “rojos”
y que también volvió a España tras algún tiempo en Tucumán (Argentina),
convertido al catolicismo y ordenado sacerdote, terminando como profesor en la Universidad de Madrid
(doy fe de la amena lectura de algunos de sus libros, de una claridad
expositiva extraordinaria y con las empecé a comprender la filosofía).
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