martes, 29 de diciembre de 2020

INTRODUCCIÓN A LA FILOSOFÍA: MENTALIDAD MÍTICO-RELIGIOSA ( 3 )

 

¿Filo-sofía = amor a la sabiduría? ¿A qué tipo de sabiduría?.

         El objetivo es “la ciudad feliz”.

         El filósofo, después de haber visto la luz, la solución, tiene como misión bajar con la linterna a la caverna y liberar a los esclavos rompiendo sus cadenas y obligándolos, aunque se resistan, a salir.

 

         Ya Epicuro decía: “vana (inútil) es la palabra del filósofo si no alivia los sufrimientos humanos”. Y para esto  hace falta un conocimiento verdadero de la naturaleza, para saber a qué atenerse.

        

         Sócrates: saber – obrar – ser feliz. Saber práctico.

 

         El amor a la especie humana exige una voluntad de verdad y de conocimiento.

 

         Platón: “la filosofía es el uso del conocimiento para provecho del hombre”.

 

         Kant: Concepto académico (historia) y concepto mundano (“conocimientos referentes a los fines esenciales de la razón humana”) de filosofía.

         “El ideal del filósofo no es ser un artista de la razón, sino un legislador de la razón humana” –dice Kant.

         Se trata de curar al enfermo, no de darle el pésame y consolar a la viuda del difunto.

         La teoría no es suficiente, aunque sea necesaria.

 

         (Marx: “hasta el día de hoy los filósofos…..”).

 

Filosofía y Ciencia son invenciones griegas.

         Dice B. Russell; “Nada semejante ha ocurrido jamás, ni antes ni después. En el breve espacio de dos siglos los griegos produjeron en los dominios del Arte, la Literatura, la Ciencia y la Filosofía un asombroso caudal de obras maestras, las cuales han establecido las reglas generales por las que se ha guiado la civilización occidental” (“La sabiduría de Occidente”).

 

         Pensamiento de Verlain : griegos – romanos – cristianismo.

         ¿Por qué apareció esta nueva mentalidad, este nuevo modelo de conocimiento en Grecia, pero en la Grecia marinera, en las colonias,  Mileto, Éfeso,…(Asia Menor).

 

         Condiciones favorables

         (Comercio, democracia-diálogo, espíritu aventurero, casta sacerdotal,….)

 

         Mileto: Comercio y colonias

         Tales: a la búsqueda de las causas reales que quiten a lo desconocido su misterio, haciéndolo familiar a los hombres.

         Previó el eclipse de sol del 28 de Mayo del 585. “Procede – dice- del curso natural de las cosas y no es debido a la ira de los dioses”. Cuando sabemos esto escapamos de la superstición y de la servidumbre.

 

         Igualmente Anaximandro, que lo seculariza todo. En sus explicaciones no hay lugar para lo sobrenatural o mítico. Las tormentas, los huracanes, los terremotos, los eclipses…tienen explicaciones naturales. ¡A buscarlas¡. El trueno no es la voz de Zeus que nos advierte y aterroriza sino “un ruido de nubes golpeadas por el viento”. “la lluvia procede del vapor de las cosas…”. “Los relámpagos proceden del viento que se escapa entre las nubes”…. Será verdadero o falso, pero ya estamos en otro nivel, en la otra mentalidad. Estamos en el campo de la ciencia.

         No tengamos miedo, pues. Son algo natural. No hay misterio. Hay desconocimiento. ¡Conozcamos¡

 

         Los milesios les quitan protagonismo a los dioses para dárselo a los hombres. Y aunque al principio sólo contemplen y estudien el mundo exterior, la fisis, posteriormente otros filósofos (sofistas, Sócrates, Platón, Aristóteles, Epicuro, los estoicos, la escuela helenística… tratarán de todos los problemas (del conocimiento, de la ética, del hombre, del mundo translunar y del sublunar, de la política, de la sociedad, de la educación, de la justicia, del alma, del más allá…pero ya sin miedo.

 

         Fueron los milesios los iniciadores del progreso, con ellos se inicia la Historia de la Razón, en períodos de auge más o menos prolongados. La fe cristiana se impondrá fuertemente durante muchos siglos, pero el espíritu griego racional siempre irá renaciendo. ¿Para qué? Para construir con la razón un mundo de bienestar y de libertad, Un mundo en el que nos sintamos como en casa y no de paso.

        

 

         La fe cristiana barrió la razón filosófica griega durante varios siglos en Europa y se impuso tanto en la vida de los hombres como en sus mentes. Vivían y pensaban cristianamente.

 

INTRODUCCIÓN A LA FILOSOFÍA: MENTALIDAD MÍTICO-RELIGIOSA ( 2 )

lunes, 28 de diciembre de 2020

INTRODUCCIÓN A LA FILOSOFÍA. MENTALIDAD MÍTICO-RELIGIOSA

 

    MENTALIDAD MÍTICO-RELIGIOSA Y MENTALIDAD FILOSÓFICO-CIENTÍFICA.

 

1.- EN LOS ORÍGENES.

 

2.- EN EL  RENACIMIENTO.

 

         1.- EN LOS ORÍGENES.

 

          Para  entender la filosofía hay que ir a los orígenes, en el momento en que emerge, porque la filosofía es un producto histórico y, una vez nacida, ya no parará. Habrá ya siempre una actividad filosófica. Costó nacer pero vivirá permanentemente entre nosotros.

 

         La filosofía surgió para solucionar problemas prácticos que los hombres tenían planteados, para dar respuesta a las necesidades humanas. Cuando las necesidades cambian, cuando se plantean otros problemas la filosofía sigue, pero dará soluciones y respuestas distintas. La filosofía de hoy no puede ser la misma que la de hace 2.500 años, pero seguirá siendo filosofía; distinta filosofía, pero filosofía. Mientras haya hombres y éstos planteen problemas, sientan necesidades, habrá filosofía. La filosofía es histórica.

 

         Al principio fueron los mitos y las religiones los que salvaban las distancias que separaban al hombre frente a un mundo extraño y desconocido.

 

         Una riada, una peste, una sequía, un niño muerto antes de nacer, el nacimiento de un niño vivo, la salida y la puesta del sol, las flores en la primavera, el arco iris….son problemas que los hombres tenían, eran fenómenos para los que no tenían respuestas. Esos hechos ocurren, pero ¿por qué ocurren?

 

         El objetivo y el sentido de los mitos, de las religiones, y luego de la filosofía es que “el hombre se encuentre como en su propia casa” precisamente en ese mundo extraño y hostil en el que se halla perdido y anonadado, siempre a la intemperie, a merced de fenómenos que no se dejan dominar, que te aplastan, que te matan, que te admiran.

 

         Los mitos y las religiones no son ni verdaderos ni falsos pero no son inútiles, tienen sentido, sirven para algo, aunque sólo sea para descansar de tantas preguntas que se hace sobre el mundo. Son respuestas a sus preguntas.

         También la filosofía, como los mitos y las religiones son sistemas de interpretación que lo abarcan todo, tanto el mundo de la naturaleza como el mundo humano. De lo que hay en mí, de lo que hay fuera de mí, de lo que hay sobre mí, son problemas, preguntas que nos hacemos. Y ya sabemos que toda pregunta busca respuestas.

 

         En el principio fue el mito. Cuando aún no se ha llegado al nivel de saber uno está instalado en el nivel del creer.

         ¿Qué es lo que hace el niño pequeñito? Creérselo todo. Poco a poco irá abandonando sus creencias (cree lo que le dice la “seño”, porque “lo ha dicho mi padre”, “lo he leído en una revista”, “lo he visto en la tele”…. Se cree que es verdad lo que otros dicen, le hacen ver,….Poco a poco comenzará a responder con su razón y al argumento de autoridad (los otros) le sustituirá su razón. Eso será verdadero o será falso y lo puedo demostrar. El lenguaje demostrativo sustituirá al lenguaje invocativo o declarativo.

 

         Es un cambio trascendental de mentalidad. De la mentalidad mítica a la mentalidad racional. Preguntas y respuestas en distinto o en el mismo plano, heterogéneas u homogéneas. A la pregunta ¿por qué llueve? Se puede responder diciendo que porque Dios quiere o porque las bajas presiones hacen que el aire se enfríe y al condensarse el vapor de agua que hay en las nubes….

 

         Desde el sendero mítico-religioso el hombre va cambiando de camino y se inicia por la senda de la razón. Del creer al saber, con lo que ello conlleva = buscar en el pensamiento racional la solución a sus problemas y necesidades. Pero estamos en los comienzos, es la infancia de la filosofía, el niño aún no es un hombre maduro, su caminar es torpe, pero ya se ha soltado. Caídas y levantadas. Es lo normal. Aciertos y errores. Es lo normal. Fragilidad e incertidumbre de los comienzos. Antes no se caía, iba en el carrito o de la mano de la madre. Antes no se equivocaba, se equivocarían su “seño”, su padre, la tele…

         La Verdad y la Falsedad son ajenas al creer, como ajenos son los colores a los sentimientos y las formas al agua. “El amor es verde o el amor no es verde”: no es ni verdadero ni falso, son sinsentidos. “El agua es triangular o el agua es cuadrada”, no es ni verdadero ni falso, es un sinsentido. Los colores y los sentimientos están en niveles distintos, como las formas y los líquidos.

 

         Al principio era el mito. Las respuestas eran divinas. Porque los dioses quieren o porque no quieren. La peste, la sequía, la riada,…todo depende de los dioses.

 

         Poco a poco el universo de los dioses va perdiendo protagonismo, cediéndoselo progresivamente al hombre.

A ese mundo desconocido y misterioso, que producía miedo y desconcierto, el nuevo hombre, la nueva mentalidad, tratará de quitarle asombro y misterio para hacerlo familiar y manejable.

         El nuevo hombre intentará hacerse dueño de sí mismo y del mundo, desacralizándolos. ¿Cómo? Razonándolos, buscando leyes que expliquen la manera de actuar de las cosas y que ésta no dependa de la voluntad, de la arbitrariedad de los dioses o de otras fuerzas sobrenaturales. No es igual decir que el sol sale porque tiene que salir (por el movimiento de rotación de la tierra) que decir que sale porque Zeus quiere que cada mañana salga.

 

         Esta primera e ingente tarea que comenzó hace 2.600 años es la que continúa y continuará mientras sigamos siendo hombres. La iniciaron los filósofos, los sustitutos de los sacerdotes y de los profetas. Y sólo contaban con sus fuerzas, sin ayudas divinas ni sobrenaturales.

         Los filósofos no se consideran depositarios de ningún secreto, ni secretos divinos ni inspirados por los dioses, sino que se arriesgan en nombre propio y con sus solas fuerzas, con el riesgo de tropezar, de equivocarse que ello conlleva. Pero el filósofo es ajeno al desaliento. Si otro le demuestra que está equivocado, reconocerá su error. Y esto sí que es un acierto. Así se inicia el camino de la filosofía y de la ciencia. Con sus caídas y sus levantadas, con su corregirse, con desdecirse, pero seguir, seguir, siempre seguir.

 

         Las respuestas surgen porque ellas son necesarias a las preguntas que los hombres se hacen. Son las necesidades prácticas las que azuzan a los hombres a ser satisfechas, y ya no valen las religiones y los mitos, porque ya no se cree que la arbitrariedad de los dioses tenga nada que ver con la regularidad que se da en la naturaleza. Si la salida del sol o la caída de una piedra dependieran de la arbitrariedad de los dioses, podría salir un día por el Norte y otro por el Oeste, y a horas distintas. Igualmente la puesta del sol. Pero NO. Siempre sale y se mete por el mismo sitio, de una manera regular. Y la piedra unas veces podría subir, otras bajar, otras avanzar hacia la derecha,…. Pero NO. Siempre cae verticalmente y a velocidad acelerada, según ley constante.

 

         Las respuestas divinas ya apenas responden.

         Para solventar, satisfacer necesidades es requisito imprescindible comprender la naturaleza y sus regularidades. Conocimiento objetivo. Conocimiento eficaz. Sólo así podremos dominarla y ser señores y no esclavos de ella. Conocerla para aprovecharse de ella, para transformarla.

domingo, 27 de diciembre de 2020

ASÍ SOY YO: CONFESIONES ( y 2 )

 


Cuando algún alumno me preguntaba sobre una cuestión político-social siempre les preguntaba si era para seguir mi opinión como la de una autoridad, por lo que les remarcaba que si ellos, a sus 18 años, pensaban como yo, ya con 60, ¡pobres ellos, no pobre yo! Porque, para ser conservador, de viejo, hay que haber sido revoltoso, contestatario, anarquista,…en la juventud.

 

Que al profesor, como a los padres, hay que escucharlos, atenderles (aunque sólo sea por educación) pero luego, por lo general, no hacerles caso.

 

Siempre me opuse a las corridas de toros porque siempre he sido consciente de que quien es cruel con los animales, a quien le gusta la crueldad de esos seres vivos (que no lo considero un problema moral sino una cuestión estética, porque los toros no son sujetos de derechos ni de deberes) dice que algo está torcido en su interior.

 

Si hay un animal que siempre me ha gustado es el galgo.

 

La caza de la liebre con galgo y caballo, en mi llana tierra castellana, contemplando una carrera tras la liebre y los galgos viejos que van los últimos y los jóvenes los primeros pero que cuando la liebre los tiene ya casi encima hace un corte de 90 grados y los galgos jóvenes, por inercia, siguen corriendo hacia delante mientras los galgos viejos, que venían detrás, se ponen los primeros y que al final serían ellos los que acababan con la liebre en la boca.

 

O cuando los galgos viejos, en vez de seguir a la liebre en su carrera, corren hacia la viña o los girasoles o el bosque porque intuyen (¿intuyen?) que la liebre, cuando se vea acosada, tenderá a ir al perdedero para hacerse invisible a los galgos.

 

Nunca disfruté de la presa, sino de la carrera inteligente (¿) de los galgos viejos.

 

Y de los viejos galgueros que veían la liebre “amoná” en su cama, desde lejos y me preguntaban si yo la veía. Imposible verla, sólo veía tierra y alguna broza. Y cuando yo iba por el cerro/valle adelante mirando y remirando y cuando saltaba, casi bajo mis pies,…

 

Y, cambiando de tercio.

 

Decía Platón que o haces política o te la hacen, así que es mejor poder hacerla e intentar hacerla.

Pero puede hacerse siendo afiliado a un partido (lo que nunca ha pasado por mi mente) o reflexionando sobre política, criticando y alabando según temas, no según personas.

 

En este último sentido sí soy político, me mojo, y cuando se me demuestra que estoy equivocado, sin problema alguno me bajo del burro, abandono mi errónea opinión y me apunto a otra más fiable.

 

 

Y que nadie me eche en cara que haya cambiado de opinión y diga, ahora, otra cosa o la contraria.

 

Reconocer un error ya es un acierto,

 

Julio Anguita, comunista, decía que si te caía bien y, sobre todo, no sólo no era un corrupto sino que ni sombra de corrupción había en él, que se votase, en vez de a uno del propio partido que sea corrupto o tenga sombra de ello.

 

Aranguren, en la lucha violenta de ETA con asesinados diarios, ante la noticia (o rumor) de que iba a aparecer una guerra sucia del Estado, el GAL, y ante el horror de la gente y la pertinaz sangre humana derramada, aprobaba dicha guerra sucia, que en esas circunstancias lo comprendía, pero que no lo aprobaba.

 

Se ha dicho, y muy a menudo, que los intelectuales siempre están en el bando del poder, para mejor vivir, o para poder sobrevivir.

No fue el caso de España.

Franco los eliminó físicamente o los expulsó de España y se exiliaron.

 

He escrito, en este blog, sobre el exilio intelectual durante los primeros años del franquismo (maestros, catedráticos de Instituto y, sobre todo, de Universidad, que dejaron a España como un erial cultural y dando fruto en los países de acogida a los republicanos, sobre todo México y Argentina.

 

Los pocos que quedaron en España había que llamarlos “paniaguados”, ninguno de talla internacional.

 

Otro error manifiestamente proclamado es que “todo intelectual es de izquierdas”, “todo intelectual tiene que ir contra el poder”

¿Por qué? ¿Y si lo que propone o aprueba es un “no” a la pena de muerte, un “no” a la tortura,..? ¿Por qué va a tener que ir contra ello? ¿Sólo porque lo proponga y lo legisle la derecha?

 

Eso es un absurdo.

 

Lo que tiene que hacer un intelectual es dar razones de lo que dice y de lo que propone.

 

Tanto obedecer al poder, cuando lo hace bien, como desobedecerlo, cuando lo haga mal, es necesario y lo propio de un intelectual.

 

Yo, lo confieso, siempre me ha gustado Bertrand Russell, como me ha gustado Voltaire y Nietzsche y, de los españoles suelo leer y coincidir con José Antonio Marina, Fernando Savater y Unamuno que me estimulan a quererlos.

sábado, 26 de diciembre de 2020

ASÍ SOY YO : LEER. ESCRIBIR, PASEAR...( 1 )

 LEER, ESCRIBIR, PASEAR,…

 

Suelo decir que soy filósofo de profesión (han sido 36 años dando clases de Filosofía en Institutos de Bachillerato, para ganarme la vida) y he sido y soy filósofo por vocación (pero no filósofo al uso, con una obra escrita propia), un lector empedernido de textos filosóficos (no necesariamente de filósofos) que me hicieran y me hagan reflexionar sobre la vida, en general y sobre el hombre en particular.

 

Me ha gustado y me gusta la lectura filosófica, que no sólo me deleite y me haga disfrutar, sino que me haga reflexionar.

 

Soy, pues, un lector de artículos más que de tratados, de reflexiones de otros que me hagan a mí, también, reflexionar, que me aceleren las preguntas para ensayar respuestas que pueden (y muchas veces suelen) ser distintas a las del autor de ese artículo.

 

Revistas de filosofía, que rumio con placer y en algunas de las cuales he intervenido como autor de algún artículo, más que de Obras Completas de filósofos.

 

He sido, soy y me considero un buen lector.

 Cuando yo era el único estudiante de mi pueblo y cuando alguien le preguntaba a mi abuela qué tal su nieto, siempre respondía: "es muy estudiado" (quería decir "estudioso") 

He sido, soy y seguiré siendo, un escritor, no seguramente bueno pero sí de lectura fácil, a veces polémica, y bastante leído (tengo a mi blog por testigo).

 

Pasear es otro de mis placeres, algo que vivir en Málaga te facilita durante casi todo el año y si vives cerca de un paseo marítimo (el mío es el del poniente malagueño, el de Antonio Banderas, y siempre a la vista la playa de la Misericordia, cuyo olor y cuya vista te gratifica y te incita a seguir “vivamente vivo”...

 

Ver salir el sol, siempre puntual según la estación del año, el día del mes y la hora del día, cuando majestuoso y aún sin despertar, sin iluminar como él lo hará pocas horas después, mirarlo, a esa hora, a la cara sin que te dañe la vista.

 

Y humanamente hablando tener tres nietos que (no sé cómo decir lo que podría decir de ellos, porque el lenguaje y las palabras siempre desenfocan el concepto y la vivencia).

 

Y esa playa de la Carihuela, en Torremolinos, todos los fines de semana en meses no veraniegos (más todos los días veraniegos) con mi sombrilla de color de camuflaje del ejército, mi silla playera, mi libro o mi revista, con la pequeña nevera con latas de cerveza fresca más unas patatas fritas de El Tío las Papas,….

Esos (y muchos más, aunque menos profundos) son mis placeres vitales, y que, si además, me han dado de comer a diario con el trabajo y ahora con la pensión de jubilación…

 

Siempre me ha interesado la filosofía, pero no sus entresijos técnicos y terminológicos, que me aburren mortalmente.

 

He leído a los filósofos clásicos, pero no directamente, sino de manera indirecta, a través de lo que otros filósofos dicen de ellos.

 

Demuestra mi ingenuidad escritora filosófica el hecho tan extendido de los miles de alumnos que confiesan que me entendían perfectamente cuando explicaba algún tema.

 

Sí me reconfortaba (y mucho)  el oírles decir a fin de curso: “fuimos platónicos cuando explicaba a Platón, luego aristotélico, cartesiano cuando se enfrentaba a la duda como método para no edificar su filosofía racionalista sobre lo que no fuera evidentemente verdadero, Hume si les gustaba y Kant, pero, sobre todo, “nos hicimos nietzscheanos tras la explicación de Nietzsche y comprendimos a Marx al ubicarlo en su contexto,…

 

Disfruto, también, cuando algún alumno, en las redes sociales, defiende la filosofía, “porque a ti no te la enseñarían bien, yo tuve un profesor al que todo se le entendía y nunca se cabreaba cuando, en la mistad de una explicación, levantábamos la mano para preguntar y…”

 

Son, los que he llamado muchas veces “las pagas extras en especie”

 

Que tengan un buen recuerdo de uno y de la filosofía (aunque, luego, excepto uno o dos, ninguno ha hecho Filosofía en la Facultad.

 

Nunca he soportado cuando han dicho en público: “lo trascendentalmente trascendental de la filosofía…”, porque huyo de palabras huecas o expresamente ininteligibles.

ASÍ ES LA VIDA ( 25 ) EUROPA ( y 4 )

 Lo ideal es que los países estén políticamente vivos y si hay que protestar, justamente, por algo, que se proteste, incluso yendo a una huelga.

 

A mí, personalmente, la monarquía no me estorba mientras se comporte como debe comportarse, pero tampoco me hace falta porque, como muchas veces he afirmado, creo que el modo más normal, más racional, de gobernarse un país es con la República, en la que periódicamente tiene que ser sometida a votación y no de manera hereditaria como lo son las monarquías, aunque funcionen bien (y en Europa son varias las Monarquías parlamentarias que así lo hacen y sus ciudadanos la aceptan).

 

Me parece que las monarquías, salvo que queden como entidades simbólico-folclóricas, pero sin poder efectivo, no tienen ya razón de ser.

Somos herederos de unos principios que empezaban diciendo que todos los hombres nacemos libres e iguales, lo cual es lo contrario de que unos nazcan reyes y otros vasallos.

 

La pregunta que muchos se hacen es qué pasa si el rey es bueno, pero el problema no es que el rey sea bueno o malo, el problema radica en que si fuera malo seguiría siendo rey igualmente.

El que sea bueno tranquiliza si ha sido votado, porque podremos también cambiarlo si sale malo, pero lo malo es que el rey siempre es rey.

 

En España ocurre que, por un lado está el rey, que nadie lo ha votado, que ha caído del cielo o lo ha traído Franco, y que es bueno, y por el otro lado están los políticos, que los hemos elegido nosotros y son, todos, unos sinvergüenzas.

 

Pero, la verdad es que, el rey (la institución monárquica) no es totalmente bueno ni los políticos son todos malos malísimos.

Pero al primero no lo podemos quitar y a los segundos sí, porque como los votamos, podemos des-votarlos (palabro no recogido por la R.A.E.)

 

Si el rey contribuyó (muerto el dictador) a que llegara la democracia, no podría haberlo conseguido si otras personas no hubieran apoyado la transición.

 

Si llegó la democracia fue, seguramente, por unas circunstancias, en buena medida azarosas y que salieron bien, y no por una habilidad divina de nadie, sino por una suma de casualidades muy afortunadas.

 

No podemos olvidar que las izquierdas tuvieron que renunciar a su eterno objetivo: una República.

Y, dentro de esa izquierda no podemos olvidar el más izquierdoso de la izquierda, el Partido Comunista y Santiago Carrillo.

 

Se nos metió la monarquía en un kit completo que, o lo apoyábamos o volvíamos a las andadas.

Y se impuso el sentido común.

Elegir lo menos malo, no lo ideal.

 

Después, y hasta hoy mismo, sigue flotando la pregunta que debería ser hecha pero que no es el mejor tiempo para hacerla: “O Monarquía o República”, en un referéndum y a quien Dios se la dé, que San Pedro se la bendiga.

 

Pero mirando a largo plazo las monarquías desaparecerán y se instalarán las repúblicas, es lo lógico y natural, y los monarcas quedarán en los libros de historia y convertidos en una especie de Reyes Magos o Papá Noel y, normalmente, sin regalos.

 

A mí me gusta que existan los Reyes Magos porque a nadie hacen mal y a los chiquillos les entusiasma, pero sólo una vez al año.

 

Que de ilusión también se vive (aunque la ilusión de los padres es otra, pero también la cara de satisfacción de sus crédulos hijos, a los que les da igual cómo los camellos pueden subir al piso noveno a beber agua y comer galletas o cómo Papá Noel viene en un carro tirado por renos, desde el Polo Norte, puede bajar por la chimenea, que ya apenas hay, y que estaría llena de hollín con un saco enorme lleno de regalos.

 

Si antes estaba el Gran Hermano y el resto, todos nosotros éramos como conejitos dominados, una vez desaparecido, como todos somos libres (al estar liberados) todos tenemos derecho a ejercer nuestra libertad, por lo que puede haber (hay) choques entre esas personas ahora libres.

 

Si antes no había conflictos fáciles entre personas, hoy estamos tan conectados que los tenemos en nuestro ordenador, a golpe tecla, para felicitarlos, para insultarlos, para preguntarle,…estamos tan conectados que las libertades de cada uno puede chocar (y choca) con la de otros muchos.

 

Si es enorme el peso de la libertad, ¿qué decir del peso de las libertades ajenas que las tenemos en nuestra propia casa, en nuestra red de medios de  comunicación social, en el Hotmail o el Gmail, en la video llamada,…?

 

Cada vez es mayor la capacidad de intervenir en los otros y ser intervenido por ellos, además de estar aporreteados (¿) por la publicidad disfrazada de información.

 

Estamos expuestos y es cada uno el que debe tomar el control de las riendas de la situación.

Podemos bloquearlo, por ejemplo, o considerarlo como spam para que deje de molestar, o ponerlo como “favoritos” si creemos y queremos que…

 

Basta que un conocido, si es famoso mejor, marque un camino para que muchos lo sigan (aunque sea un bulo, una fake news que nos cuelan)

 

Esas noticias falsas, conocidas también con el anglicismo “fake news”, son un tipo de bulo que consiste en un contenido pseudoperiodístico difundido a través de portales de noticias, prensa escrita, radio, televisión y redes sociales y cuyo objetivo es la desinformación y, como consecuencia, la manipulación y el engaño.

 

Y como tenemos una tendencia a la mímesis….

 

Para que la vida merezca la pena vivirla hay que pensar y hacer lo que Sócrates nos dijo hace 2.500 años: “una vida sin examen no merece la pena de ser vivida”.

 

Debemos, también, hacerle caso a Kant: “sapere aude”, atrévete a pensar por ti mismo, sin tener que consultar con, sin necesidad de tutores (siempre interesados en algo).

 

Esa, y no otra, es la mayoría de edad que proclamaba Kant en: “¿Qué es la ilustración”?

 

Debemos, pues, ser ilustrados.

jueves, 24 de diciembre de 2020

ASÍ ES LA VIDA ( 24 ) EUROPA ( 3 )

ASÍ ES LA VIDA ( 23 ) EUROPA ( 2 ).

 

 

¿Cómo comparar el castellano, o español, con sus muchos millones de hablantes, con el euskera o vascuence o con el catalán y sus pocos miles de hablantes, además de que sus ciudadanos también hablan el español?

 

Con tanta lengua española que se habla ya en Estados Unidos no es de extrañar que, más pronto que tarde, el inglés se vaya fundiendo con el español, igual que el inglés europeo se fundió con el francés, un inglés inyectado de francés.

 

El gran error de los nacionalistas ha sido convertir al Estado en algo que no es, por la vía de la fuerza de la homogeneidad (una lenguaàun estado) cuando debería serlo, precisamente, por la fuerza de la heterogeneidad (un Estado y muchas lenguas).

 

Si el Estado ha tenido un componente nacional era, precisamente, para aunar diferencias, es decir, unos derechos democráticos que los pudiera disfrutar el emigrante, el judío, el musulmán….

Y en el momento en que el Estado entra en crisis y empieza a convertirse en sancionador de una homogeneidad, pierde su auténtica función y se convierte en una opresión para los ciudadanos, en vez de ser una garantía de la libertad.

 

¿Estamos o estaremos más cerca de África que de Alemania?

 

Creo que estamos más cerca de Alemania que de África, pero no debemos echar en saco roto nuestros lazos ancestrales, histórica y culturalmente, con judíos y con musulmanes, aunque nunca debemos copiar sus teocracias islámicas y seguir con nuestra democracia occidental aunque sea manifiestamente mejorable.

 

Aunque es verdad que los nacionalismos combativos pueden dar una falsa imagen de España, de cara al exterior.

 

Ya Machado había dicho que “la cuestión catalana no podía solucionarse y habría que soportarla”

 

Más concretamente: “Pues bien, señores; yo sostengo que el problema catalán, como todos los parejos a él, que han existido y existen en otras naciones, es un problema que no se puede resolver, que sólo se puede conllevar, y al decir esto, conste que significo con ello, no sólo que los demás españoles tenemos que conllevarnos con los catalanes, sino que los catalanes también tienen que conllevarse con los demás españoles”.

 

Y “conllevar” –según la RAE, en su segunda acepción es: “Soportar con resignación una enfermedad, una pena o una situación que no satisface completamente.

 

Yo soy “castellano” (salmantino) de nacimiento, llevo más de 50 años en Andalucía, por lo que me considero “andaluz”, aunque sea sólo de adopción (lo que no es merma alguna) y como de esos 50 años, 30 han sido/son en Málaga, me considero “malagueño de corazón”, pero todo, siempre y al mismo tiempo, y por encima de todo, me considero “español”, y también “europeo”.

 

Mientras, los nacionalismos son exclusivistas, provincialistas o regionalistas, de vuelo corto, ombliguistas,…del terruño por el cual sacrificarían la vida.

Eso sí, después de inventarse pasados felices inexistentes, históricamente desde tiempos lejanos, asiduamente perseguidos por el Estado Central, con derechos adquiridos,…todo un artificio.

 

Tras morir Franco España apareció ante el mundo como una gran incógnita.

 

¿Seguiría siendo la sin urnas o la de urna cerrada, la del tricornio y el cura, la del botijo y las castañuelas,…? ¿O se acercaría políticamente a los democráticos países europeos, fueran monárquicos o republicanos?

 

La Constitución del 78, gracias a ceder todos los partidos reivindicaciones programáticas propias, nació una “monarquía (aunque hubiera sido impuesta por el fallecido dictador) parlamentaria”.

 

Y, caminando-caminando por esa senda ya podemos ver libros españoles en las librerías europeas, y las salas de cine proyectan películas españolas y algún que otro Óscar ha caído en nuestras manos, y algunos de nuestros cantantes no sólo no decepcionan sino que son números unos en las listas europeas, y ¿qué decir de nuestros pintores?

 

Creo que España, hoy, detenta una dignidad cultural en el mundo.

 

Pero lo que sí sabemos es que el inglés es el lenguaje de la ciencia y de la tecnología, y no por Oxford y Cambridge (aunque, también) sino, sobre todo, por lo norteamericanos, con Universidades e Institutos tecnológicos cualitativamente supremos, pero tampoco debemos olvidar que los americanos están hechos de pedazos europeos, como Frankenstein, sobre todo irlandeses y británicos, es decir, que la cultura americana es un popurrí de influencias europeas, y pasada por la turmis, sin contar con genios indios, alemanes,..

 

Últimamente los hispanos, y el castellano está invadiendo Estados Unidos.

 

La ideología política influye en el auge de la cultura.

 

En España, en concreto, la derecha española ha sido siempre muy pobre, se ha como enquistado en el tiempo con el apoyo además de la Iglesia y el Vaticano.

La mayor parte de los creadores han sido siempre de izquierdas o de centro-izquierda, progresistas.

 

Y es verdad que las derechas siempre han sido, en España, bastante gritonas y bastante zarzueleras y la cultura, más bien, debe tener siempre un elemento progresista y libertario, rompedor, ensayando nuevos géneros y formas de comunicar los nuevos mensajes.

Pero nunca-nunca un comunismo ortodoxo.

 

Incluso a otros niveles, los fascistas de Mussolini o los nazis alemanes al menos representaban la modernidad, eran movimientos modernos, negativos, pero modernos, mientras que aquí, el fascismo fue esencialmente reaccionario y la derecha franquista era clerical, reaccionaria, vaticana, gazmoña, represiva,…como más cavernaria.

 

La cultura, que debería ser sólo cultura, cuando gobiernan las derechas dicen los de izquierda que se resiente de dirigismo político.

Exactamente lo mismo que dicen los de derechas cuando son las izquierdas las que están en el gobierno.

 

El mejor ministro de cultura, pues, es aquel cuyos gustos personales se reflejen menos en la cultura general del país, porque no sería bueno que sus preferencias resultaran demasiado reflejadas o demasiado dirigidas.

 

El auténtico artista no tiene que ser el querompa absolutamente y acabe con todo lo anterior, esa es un proyección muy infantil.

ASÍ ES LA VIDA ( 22 ) EUROPA ( 1 )

  

La nueva Europa o Unión Europea ha dejado de ser nueva, porque no se renueva y de “Unión” parece que es poca unión, más bien países desunidos aunque momentáneamente parezcan estar unidos por intereses económicos, ni políticos, ni sociales.

 

Cada país pregunta a los demás “por lo suyo” y “lo suyo” es poner menos, cooperar con menos y recibir más.

 

A mí, como no me gusta futurizar (mis notas de recordatorio no van más allá de 4 días), como veo a una Europa agonizante preveo que desaparecerá como han desaparecido otros imperios a lo largo de la historia y que surgirán (creo que ya están aquí) unos nuevos imperios que, desafiando al Imperio Americano y sobre las ruinas de esta Europa, vendrán o estarán en Asia (China, Japón,…)

 

La Europa defensora de los Derechos Humanos parece hacer aguas porque no todas los interpretan igual, sobre todo tras las avalanchas de emigrantes refugiados que huyen de la guerra, del hambre,… y parecen venir a cobrar lo robado en ellos tras muchos años de ocupación y explotación.

Pero como vienen con sus costumbres, con sus ideas, sus creencias, su moral, su religión, su concepto de la mujer, de los hijos y de la familia, incluso con su gastronomía y su estética parecen estar haciendo agujeros, rotos, en los mismos países que los están acogiendo.

 

La integración en el país de acogida parece poco integrativa, así que van surgiendo guetos, con sus ideas y culturas de sus países de origen, en los extrarradios de las grandes ciudades.

 

El proyecto europeo siempre me pareció atractivo y defendible pero no parece que esté siéndolo para los nuevos ciudadanos forasteros.

 

Si reflexionamos podemos comprobar cómo el Imperio Americano se fraguó sobre la cultura europea allí transplantada por los primeros emigrantes (irlandeses, ingleses y franceses sobre todo) porque el resto de países americanos en los que, muchas veces a base de rapiña, de conversiones religiosas, de fuerza armada,…no parece que haya surgido algo equivalente, sino naciones-islas en las que el castellano y el portugués, como lenguas, no han fructificado en un progreso económico competitivos ni convertidos en Imperios.

 

Europa se ve, y cada vez más, como un país viejo, como una señora mayor maniática y menopáusica en oposición al vigor juvenil de países-imperios asiáticos.

 

Y si Europa va dando muestras de ese poco vigor ¿qué podemos decir de nuestra España, una nación europea? ¿Es la excepción o el ejemplo de lo que no debe hacerse?

 

La Unidad Europea que surgió con tanta ilusión parece haberse ido desuniendo es Unión y siendo cada vez más, frágil y tambaleante, cada una hija de su padre y de su madre, aunque podamos viajar libremente por todos sus territorios y tengamos una moneda común.

 

Y, como hemos dicho anteriormente, el proyecto era más que bueno, porque nunca se había intentado una Unidad con países tan dispares.

 

Pensar que a un griego, a un sueco, a un alemán, a un italiano, a un español…se les pudiera meter en el mismo saco cuando todos tenemos nuestra propia historia, cuando hemos sido pueblos distintos que hemos ido cultivando y amamantando las diferencias, no es una tarea fácil.

 

Y en este sentido, cuanto más se vaya extendiendo la ampliación, con la incorporación de nuevos países, también con su lengua, sus costumbres, su historia,…menos Unión Europea y más totum revolutum de teselas distintas que ni siquiera forman un mosaico atractivo.

 

Nadie duda de las conquistas sociales que la Vieja Europa ha lo grado poner en práctica en sus trabajadores pero ¿qué puede pensar el capitalismo si los nuevos trabajadores sobrevenidos traban el doble y cobran la mitad que los trabajadores europeos?

 

Pues han encontrado la solución: ya que no podemos con la carga de nuestros trabajadores llevemos fuera, a aquellos países, en que existen ese tipo de obreros que, además estarán agradecidos.

 

Quien haya leído, y reflexionado, sobre el concepto de “plusvalía” sabe que se puede ganar más vendiendo más caro, pero también ahorrando en lo que denomina “capital variable”, la fuerza de trabajo.

 

Si gano más pagando menos, ya que no voy a poder vender más y más caro, por aquello de la competitividad, transplantemos nuestras fábricas allí donde la fuerza de trabajo está deseando trabajar y mucho más barato.

 

Y todos sabemos que España no es uno de los países más boyantes de esa Europa, pero también tenemos nuestros artesanales de sol, playa, cultura y arte, además de ser un doble puente: uno con África, a apenas 11 kilómetros de distancia y el otro con Centroamérica y Sudamérica, mercados muy amplios.

 

Y si esta América comenzó siendo colonia, sobre todo española, hoy es un conjunto de países jóvenes y con una gran capacidad económica, lo que nunca debe olvidar ésta nuestra Europa, a estos hijos mayores de edad.

 

Si Europa no es capaz de ver el Norte de África como una posibilidad vamos a convertirlo en un cuartel en el que vamos a terminar todos haciendo guardia en la garita por miedo “a que venga el moro”, aunque el moro va a venir-está viniendo hacia los países más cercanos (Grecia, Italia, España (ahora mismo hacia las costas andaluzas y levantinas y, lo último, las avalanchas que llegan a Canarias).

 

Los franceses defienden su lengua en las ya nuevas naciones y antes colonias francesas ¿por qué los españoles hemos dejado al albur el castellano en la América latina, incluyo ayer mismo, hemos permitido/vamos a premitir que el castellano o español deje de ser la lengua “vehicular” en las autonomías que, también, tiene una lengua propia, aunque sea muy minoritaria (todo sea por un puñado de votos para la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado)

domingo, 20 de diciembre de 2020

ASÍ ES LA VIDA ( 21 ) METÁFORAS Y ETIQUETAS ( y 2 )

 Lo que sí ha cambiado es la consideración de señor y dueño absoluto del padre en la familia, en que se hace lo que el padre dice que hay que hacer.

 

Metáforas antiguas se mantienen: “trabajar como un negro”, “ser tan poco fiable como un gitano”, “engañarte como a un chino”, “más vago que la chaqueta de un guardia”, “más tonto que Abundio, que iba a vendimiar y llevaba uvas de postre”, “la mujer, en la cocina y con la pata quebrada”,…

 

La palabra “virtud” en China se representa con una madre con su niño en brazos, mientras en nuestro vocabulario “virtud” viene de “viril”, que es la fuerza del guerrero.

Dos concepciones completamente distintas, una la imagen acogedora, de cuidado, de ternura, la otra una fuerza viril.

 

Aunque, a veces, el lenguaje no llega, ni hace falta, para representar un afecto, como la caricia, como sostener la mano de un moribundo, ayudar a cruzar la calle a un ciego, a un inválido, a una anciana,…gestos más significativos que el lenguaje mismo, significados no lingüísticos o lenguajes no verbales.

 

El gesto es un lenguaje significativo, pero que puede no ser bien interpretado por el que no está en esa cultura (saludarse con tres besos, y no con dos, besarse las mejillas y no en los labios, saludarse chocando la nariz de ambos interlocutores...

 

El lenguaje no es solo el lenguaje oral, también lo es (y mucho) el gestual.

Quien haya jugado a las cartas, en parejas, los distintos gestos que los compañeros se transmiten de las cartas que llevan guiñando un ojo, los dos, tocándose una oreja, moviendo la cabeza a un lado o a otro, separar tres cartas a la derecha disimuladamente para que el compañero sepa qué triunfo llevas y cuantos triunfos.

 

¿Y ahora con los ordenadores?

El ordenador va a hacer lo que tú le mandes que haga.

Teclear es como si uno fuera el sargento dándole órdenes a un recluta, pero sin hablar, a golpe de tecla y no debes cabrearte porque si no lo hace es porque el que se ha equivocado eres tú, y no el ordenador.

 

¡Cuántas veces he “marcado” un texto, sin querer le he dado al “intro” y se me ha borrado todo (menos más que me enseñaron recuperar el texto borrado)

 

Pero ¡cúantos tacos malsonantes no habré yo soltado ante tanto trabajo inútil¡

 

Pero las órdenes a un ordenador son del todo o nada, de Sí o No.

Y a veces es él el que te pregunta: ¿quieres salir de esta página? ¿Quieres publicarlo?

 

“Ten cuidado con tu manera de interpretar el mundo porque el mundo es tal como tú lo interpretes”

 

Hasta ahora el mundo ha sido tal como lo han interpretado los teólogos y los filósofos ¿en manos o en poder de qué, de quién o de quiénes está la interpretación del mundo?

 

El médico te ordena una ecografía de…lo que sea, y se fía de lo que la radiografía dice: “tienes esto”, lo que el aparato le ha dicho.

 

La interpretación del mundo, hoy día, es la que te da la televisión y los medios de comunicación, y puede no ser veraz, pero uno no puede estar en el Golfo Pérsico para ver qué es lo que allí, en realidad, pasa, pero los bulos, las “fake news” están siendo el pan nuestro de cada día, engañando a los incautos.

 

La Filosofía, hoy, tiene una función que no consiste tanto en responder a las grandes preguntas, sino en rechazar ciertas respuestas: dogmas, supersticiones, trivialidades, imposiciones del poder,…

 

Lo que se intenta a través de la filosofía es sacudirnos de encima errores que se imponen, obligaciones de codicia.

 

A veces, la persona inteligente entiende que, frente al estúpido, tiene menos convicciones y menos creencias que el tonto.

 

El tonto tiene más ideas, aunque sean descabelladas, y más seguridad, por lo que la labor de desembarazarse de ideas es tan importante.

sábado, 19 de diciembre de 2020

ASÍ ES LA VIDA ( 20 ) METÁFORAS-ETIQUETAS ( 1 )

 

 

 Los jardines o parques públicos, la enseñanza universal y gratuita, como la sanidad, como el cobrar por estar en paro, las jubilaciones hasta que la muerte nos separe,… ¿todas estas actividades son de derechas o de izquierdas, son propias de “capitalistas” o de “comunistas”? – le preguntaba a mis alumnos cuando veíamos las características del capitalismo a lo largo de la historia (defensa a ultranza de la propiedad privada y el que quiera sanidad, educación,… que se la pague)

 

O cuando veía a un alumno escribiendo o grabando su nombre o cualquier otra cosa en el pupitre, como “te quiero, Julia” ¿Haces esto en tu casa en la mesa del comedor? No –me respondía- ¿entonces por qué lo haces en el pupitre? –porque éste no es mío.

 

Parece que lo que es de todos no es de nadie, como si él no fuera uno en ese “todos”.

 

A lo público, como en general, es gratuito, no se le da el valor que tiene.

 

¿Son tan distintos (aunque no sean totalmente iguales), hoy en día, los presupuestos del Estado siendo de izquierdas o de derechas los gobiernos salidos de las urnas?

 

¿No habrá que terminar ya con esas etiquetas: izquierdas-derechas, moderno-anticuado, progresista-regresivo,… que, incluso en su origen nada tenían que ver con las ideologías sino con el lugar de los escaños que ocupaban en el parlamento?

 

Como si fueran dos equipos de fútbol y cada uno tenía que decidirse a ser de uno o de otro equipo.

 

Luego –es verdad- que había (¿hay?) una sexualidad de izquierdas, una ética de izquierdas, una bandera, unos himnos,…o de derechas.

Hasta un modo de vestir.

 

¿Una corbata en uno de izquierdas? ¿Ir descamisado uno de derechas?

 

Estéticas, gustos cinematográficos, incluso literarios y gastronómicos distintos en unos y en otros.

 

Hoy ya no hay tanta bipolaridad.

 

¿Te imaginas una comuna con catorce parejas de derechas, intercambiándose entre ellos, donde los hijos eran –seguro-seguro, de las madres pero los padres podían ser cualquiera de la comuna, porque, nada más nacer, los niños pertenecían a la comunidad, comían lo mismo, en los mismos comedores, las ropas no eran de propiedad privada, como no lo era la tierra, el fruto de la misma, los instrumentos de labranza,…?

 

La religión siempre ha sido de derechas, así que primaba la monogamia, la actividad sexual tras pasar por el altar, sin poder divorciarse porque “lo que Dios ha unido….” Ya que el matrimonio era un Sacramento….

 

Hoy las personas ya no son tan monolíticas como lo eran entonces, cada vez hay más síntesis de todos entre todos.

 

Es verdad que para la izquierda la productividad, la acumulación de bienes, la propiedad privada a rajatabla,…no son los más altos valores.

Cada vez se impone más un reparto equilibrado de los bienes (un piso, un coche, unas vacaciones,…).

 

La globalización real (no sólo la económica y el movimiento de capitales) siempre ha sido más de izquierdas (“proletarios de todos los países, uníos”, “el himno de la Internacional”,…

 

Aunque el Comunismo, de izquierdas, y el capitalismo, de derechas, yo no sé cual de los dos ha sido más predatorio y más destructivo y de sobra conocidos en el siglo XX.

 

Tanto las izquierdas como las derechas pueden ser muy malas o pueden tener aspectos muy positivos.

 

Naturalmente donde más se diferencian es en la defensa del trabajador o en la defensa de la empresa.

 

Hoy todos sabemos que los problemas globales de la humanidad sólo pueden afrontarse globalmente, como, hoy día, el cambio climático.

 

La imposición dogmática ciertos credos, la intolerancia, la defensa de lo privado, el racismo, la xenofobia, la homofobia, no admitir otra sexualidad que la heterosexualidad, por lo que critican a los colectivos LGTBI, como depravados, …son más de derechas aunque pudiera haber de izquierdas (sobre todo ver a los inmigrantes como rivales para los puestos de trabajo).

viernes, 18 de diciembre de 2020

ASÍ ES LA VIDA ( 19 ) LA MUERTE ( y 2 )

 

Sabemos que los genios no son totales, genios en todas las facetas humanas, y que hay genios matemáticos que socialmente son inadaptados, genios que son incapaces de una vida afectiva sentimental,…

 

Si admitimos, sin duda, que el hombre ha llegado por evolución de la especie ¿podríamos acelerar, culturalmente, científicamente, dicha evolución, diera un paso más y poder convertirse en algo distinto y superior?

¿O debemos aceptar que el hombre fue creado por Dios así y el hombre ya no puede dar un paso más?

No aceptar esa posibilidad de un escalón más y más alto significaría aceptar la premisa religiosa de una creación de la nada.

 

Las especies no evolucionan dentro de la misma especie, sólo las variaciones medioambientales hacen que determinadas formas de esa especie resulten mejor y las otras desaparezcan.

 

El hombre han encontrado los medios para compensar sus deficiencias y, lo mismo que los animales no tienen otra forma de cultura que la que desaparezcan los menos aptos en un determinado contexto biológico y los otros prosperen.

 

El hombre encuentra la posibilidad de crear contextos en los cuales funcione la mayor parte de los seres humanos.

 

La cultura va creando un caldo de cultivo logrando que el medio se adapte a nosotros y que nosotros no nos adaptemos al medio.

 

Mientras que el animal tiene que adaptarse siempre al medio el hombre adapta siempre le medio a sí mismo (como la calefacción y el aire acondicionado).

 

Nosotros somos una especie que ha prosperado mientras que otras han desaparecido, no es que hayamos sido otra cosa.

 

Aunque uno puede imaginarse la destrucción del mundo cultural por una conflagración nuclear o por el choque de un aerolito y puedan quedar sólo unas cuantas especies humanas y éstas tuvieran que reproducir ese proceso cultural nuevo y de nuevo.

 

Y eso, por poder, podría ocurrir pero sin llegar a ser tan negativo como quien decía: “yo no creo que el hombre descienda del mono, pero me parece que avanza hacia él de manera agigantada”.

 

Como y porque los hombres somos sociales, no sólo en el sentido colectivo, también en el sentido comunicativo, nos duele tanto la soledad sin tener que llegar al pesimista Schopenhauer: “el dilema humano es que hay que elegir entre la soledad y la ordinariez”

 

Mirar al otro, dialogar con él, reconocimiento mutuo,…es lo humano.

 

No caemos en la cuenta que si deseamos ser bellos, ser ricos, ser…., ser…. es porque existen los otros y nos relacionamos con ellos, porque si viviéramos totalmente solos, en una isla,… ¿para qué aspiraríamos a todo eso o cosas por el estilo?

El dinero es lo único que no nos llevaríamos a una isla desierta.

En el fondo nada hay tan social como el dinero.

 

Es verdad que somos egoístas, pero es porque, antes, somos gregarios.

 

¿La soledad es negativa?

 

J.L. Aranguren, en su Ética distingue varios tipos de soledad: la soledad soportada, la soledad sobrevenida, la soledad buscada,…

 

La soledad, cuando no es abandono, cuando no es un cierto recogimiento, sí es negativa.

 

Pero uno puede encerrarse en su casa rodeado de libros, de música, de películas selectas,…pensando cosas en diálogo con otros y no está solo, aunque así lo parezca, pero está muy bien acompañado.

 

El libro es una especie de conjuro mágico, sin necesidad de magia, por el cual convocamos a nuestro lado a Platón, a Kant, a Nietzsche,…es un placer del que se disfruta, poder dialogar virtualmente con ellos a través de sus escritos y darles la razón u oponerse a ellos,…

 

La soledad absoluta no existe, ni puede existir, porque vivimos con nuestros recuerdos con los que podemos alegrarnos o entristecernos.

 

Robinson solo, en la isla, se las ingenia e inventa todos los mecanismos de la compañía para estar, de algún modo, acompañado.

 

Además, se puede estar solo de alguien concreto pero no de otros muchos con los que estar en compañía.

 

También se puede estar solo rodeado de mucha gente, en un gran concierto o en una discoteca.

 

Yo tengo dos hijas: una me pidió un equipo de música para poder estudiar en su cuarto, la otra, en cambio, tenía que estar sin ruido alguno alrededor para estudiar (hasta el zumbido de una mosca le molestaba).

 

Yo, que no soy experto en música, y al que no le gusta el flamenco, sí me gusta escuchar, de fondo, música clásica mientras leo, paseo o resuelvo un sudoku, pero no soporto la música elevada de los grupos musicales modernos y, por supuesto, no es que no me guste, es que odio el reggaeton.

 

Decía (otra vez) Schopenhauer que “la capacidad mental de una persona es inversamente proporcional a la capacidad de ruido que soporta”, es decir, que cuanto más bruto es alguien más ruido tolera y cuanto más inteligente menos lo soporta.

 

La necesidad de ruido es (creo yo) una deficiencia.

 

Si la amistad ha sido siempre bien vista y exaltada no es (al menos sólo) por el deseo sexual sino porque son dos yoes que se reconocen distintos pero que se lo pasan bien hablando, simplemente, hablando.

Lo que llamamos “amistad” son transacciones mutuas de afecto.

 

Aunque existen, y muchas, amistades accidentales y pasajeras, como las que se hacen en una excursión, en un viaje.

Otras suelen ser más duraderas, como las que se hacen en el colegio o en la universidad, en la mili, en el trabajo.

 

Pero una soledad buscada, y conseguida, es altamente gratificante.

jueves, 17 de diciembre de 2020

ASÍ ES LA VIDA ( 18 ) LA MUERTE ( 1 )

 

LA MUERTE.

 

Pocos son los conocimientos verdaderos y ciertos.

Parece que el “hoy” siempre va a ser superado por el “mañana” y, al menos, más matizado.

Las evidencias son pocas, las de las Ciencias Formales que, como su nombre indica, tratan de formas y no de materia, porque las Ciencias Naturales y Sociales están constantemente en proceso de superación.

 

Lo cierto es que si las ciencias no hubieran sido, siempre inciertas, no habría habido avances.

Si Newton se hubiera creído todo lo que decía Ptolomeo nunca habría avanzado la ciencia.

Sólo los ingenuos creen que las verdades científicas son verdaderas, ciertas y para siempre, porque los científicos siempre han sabido que el mundo estaba lleno de dudas y de dificultades.

 

La ciencia, en su caminar en el tiempo, siempre descubre cosas nuevas que superan y sustituyen a las anteriores pero que son conscientes de que mañana mismo sus verdades serán cuestionadas y superadas.

 

En la entraña de la ciencia está el “no parar” y siempre ha estado cuestionándose a sí misma, a diferencia del mundo religioso y otros mundos dogmáticos.

 

La ciencia nunca puede ser dogmática, como tampoco los científicos ni los filósofos.

 

Una “filosofía dogmática” es una “contraditio in terminis”.

 

Lo que nunca se ha puesto en cuestión, en la ciencia, es el método científico, el camino por donde caminar, que es una mezcla de Razón y Experiencia.

 

(En otro lugar de este blog está colgado el “método científico de Newton” que es la entrada más visitada por los que entran en él)

 

Mientras el mundo religioso lo ha sabido todo desde el principio (la “palabra revelada” por su Dios correspondiente) el mundo científico está constantemente en contradicción entre los mismos científicos, entablándose una lucha entre sus teorías hasta que la balanza de la mayoría se inclina por una de ellas que, desde ese mismo momento, empieza a estar cuestionada y buscando otras teorías que la superen.

 

La ciencia duda, pero no duda de sus métodos de investigación, su duda es social por lo que las verdades descubiertas son cuestionadas.

Hoy sabemos mucho más que ayer pero, seguro-seguro, que menos que mañana, en que aparecerán nuevos descubrimientos científicos (no hay más que mirar los avances en Biología, en Genética, en Farmacia, en reproducción, en instrumental científico,…)

 

No es de extrañar que el día que se inventó el ferrocarril se cuestionara sus beneficios o si era perjudicial.

 

Hoy tenemos cuestionada la Energía Nuclear (otro gran descubrimiento científico) sabiendo que puede ser perjudicial un escape o una explosión (recordemos Chernobil) pero que también está causando muchas aplicaciones positivas.

 

Pero debemos ser conscientes que la ciencia la hacen los seres humanos y éstos son limitados.

 

¿Hasta poder superar la muerte y hacernos inmortales?

 

Para que un coche dure muchos-muchos años habrá que irle cambiando piezas un año sí y otro también hasta que, al final, ese coche ya no sea el primer coche sino otro pero sin haberlo destruido previamente.

 

¿Que nosotros podemos alargar mucho-mucho más el tiempo de vida? SÍ, pero ¿Que ésta sea eterna?...

 

¿Seguiremos muriendo sólo por accidente o por voluntad propia?

 

Yo no creo que ese deseo, tan humano, pueda ser cumplido porque la muerte forma parte de nuestro código genético, o sea, que no es algo que nos ocurra por accidente sino que viene ya inscrito.

 

La muerte tiene relación con el hombre por el hecho de ser éste un ser sexuado y, por lo tanto, programado para reproducirse y ser sustituido por otros individuos de su especie.

 

Para nosotros, la muerte es una desgracia, una catástrofe, pero para la especie humana es un requisito.

 

Lo que la especie humana quiere (¿), su objetivo es no desaparecer sino seguir existiendo, pero para ella nosotros le somos indiferentes.

Que sean otros y no nosotros, a la especie le da exactamente igual.

 

Existe la muerte porque existe el sexo a través del cual unos nuevos eslabones de la especie van apareciendo al tiempo que otros van desapareciendo, pero la cadena-especie sigue adelante en y con la vida.

 

El problema de la mortalidad no es si te mueres antes o después sino si te mueres.

 

“Mors certa, solum incertum tempus est”. La muerte es cierta, segura, lo que es incierto es el tiempo en que ella llegará, el cuándo moriremos.

 

Cuando la gente vivía, de media, cuarenta años, se preguntaba si llegaría a los setenta, hoy, que vivimos una media de ochenta nos preguntamos si llegaremos (como es nuestro deseo) a los ciento veinte, pero es que si la media fuera doscientos cincuenta seguiríamos preguntándonos si llegaríamos a lo mil, y así sucesivamente.

 

Hoy los científicos, con los datos de que disponen, encuentran razones biológicas para que no se pueda vivir más de 130 años.

 

¿Podría llegar la ciencia a crear un nuevo tipo de especie humana a fuerza de manipulación genética?

¿O esa pregunta es como si la ciencia se preguntara si podrá vencer la ley de la gravedad?

 

La ciencia lo que piensa es que las leyes que operan en un momento se aplican siempre.

La ciencia lo que no puede es pensar que las propias leyes que le sirven para avanzar van a servir para invertirse y cambiar el sentido del conocimiento.

 

Uno puede imaginarse una forma de volar a pesar de que exista la ley de la gravedad y gracias, precisamente, a que existe.

 

A pesar de que en el lenguaje habitual se dice que el avión desafía la ley de la gravedad, lo cierto es que no sólo no la desafía, sino que la confirma.

Gracias a la ley de la gravedad el avión puede volar.

 

Es lo que cierto día me decía un ingeniero aeronáutico: “Vosotros creéis que el avión va volando por el cielo cuando en realidad va colgado de él”

¿Recordáis lo de la paloma de Kant?

 

Decía Kant que la paloma, cuando siente la resistencia del aire al volar ligera y libre, puede tener la tentación de imaginarse que volaría mucho mejor aún en un espacio vacío, sin darse cuenta de que lo que parece resistencia y oposición, es precisamente el punto de apoyo que le hace posible mantener el vuelo.

 

Igualmente, cuando sabemos que podemos alargar la vida humana con un cierto tipo de alimentación, o con ejercicio físico, o con ciertos productos medicinales, no estamos pensando que eso desafía la mortalidad humana, sino que la confirma.

 

Precisamente porque conocemos que oxida y daña nuestras células sabemos cómo podemos retrasar ese proceso y sabemos que se puede retrasar sólo hasta ciertos límites, como la goma que estiramos y estiramos pero sabemos que si seguimos estirándola llegará un momento en que ya no pueda seguir estirándose más y se romperá.

 

Lo que no se puede pensar es que algo que cure esas células logre hacer que esas células no se destruyan nunca.

 

Lo que parecía una fantasía humana, la creación de un ser humano en probeta, ya es realidad.

Aunque, si por fantasía es, mayor fantasía era la de la mitología en la que hay muchos casos de partenogénesis.

 

“Modo de reproducción de algunos animales y plantas, que consiste en la formación de un nuevo ser por división reiterada de células sexuales femeninas que no se han unido previamente con gametos masculinos.

 

¿Más fantasía?

 

“Al aparecer en todo su esplendor de dios, los rayos que despedía abrasaron a Sémele. Hermes arrancó del vientre de Sémele al hijo nonato y lo cosió al muslo de Zeus. Varios meses después nació el niño, llamado Dioniso (“dos veces nacido”)”

 

¿Podemos llegar a manipular la especie humana y cambiarla?

Una buena pregunta.

 

Lo que ocurre es que a los filósofos lo que más nos interesa y nos importa es el individuo, que es/debe ser un fin en sí mismo.

Y si podemos mejorarlo y que ningún individuo nazca, por ejemplo, con espina bífida, mejor que mejor.

 

Pero si es para que el nuevo ser no sea libre de elegir, de poder buscar la verdad, de poder caer en el vicio, de ser una persona humana normal y corriente con opciones morales,…no.

 

Sabemos que el cerebro humano es como el iceberg, que sólo muestra un 10% de su masa por encima del agua mientras el otro 90% permanece por debajo, pero ¿Y si pudiera el cerebro actuar con el 100% de sus capacidades? ¿Sería ético o inmoral llevarlo a cabo? ¿Sería positivo o negativo?