¿Cómo comparar el castellano,
o español, con sus muchos millones de hablantes, con el euskera o vascuence o
con el catalán y sus pocos miles de hablantes, además de que sus ciudadanos
también hablan el español?
Con tanta lengua española que
se habla ya en Estados Unidos no es de extrañar que, más pronto que tarde, el
inglés se vaya fundiendo con el español, igual que el inglés europeo se fundió
con el francés, un inglés inyectado de francés.
El gran error de los
nacionalistas ha sido convertir al Estado en algo que no es, por la vía de la
fuerza de la homogeneidad (una lenguaàun estado) cuando debería serlo, precisamente, por la
fuerza de la heterogeneidad (un Estado y muchas lenguas).
Si el Estado ha tenido un
componente nacional era, precisamente, para aunar diferencias, es decir, unos
derechos democráticos que los pudiera disfrutar el emigrante, el judío, el
musulmán….
Y en el momento en que el
Estado entra en crisis y empieza a convertirse en sancionador de una
homogeneidad, pierde su auténtica función y se convierte en una opresión para
los ciudadanos, en vez de ser una garantía de la libertad.
¿Estamos o estaremos más
cerca de África que de Alemania?
Creo que estamos más cerca de
Alemania que de África, pero no debemos echar en saco roto nuestros lazos
ancestrales, histórica y culturalmente, con judíos y con musulmanes, aunque
nunca debemos copiar sus teocracias islámicas y seguir con nuestra democracia
occidental aunque sea manifiestamente mejorable.
Aunque es verdad que los
nacionalismos combativos pueden dar una falsa imagen de España, de cara al
exterior.
Ya Machado había dicho que
“la cuestión catalana no podía solucionarse y habría que soportarla”
Más concretamente: “Pues
bien, señores; yo sostengo que el problema catalán, como todos los parejos a
él, que han existido y existen en otras naciones, es un problema que no se
puede resolver, que sólo se puede conllevar, y al decir esto, conste que
significo con ello, no sólo que los demás españoles tenemos que conllevarnos
con los catalanes, sino que los catalanes también tienen que conllevarse con
los demás españoles”.
Y “conllevar” –según
Yo soy “castellano”
(salmantino) de nacimiento, llevo más de 50 años en Andalucía, por lo que me
considero “andaluz”, aunque sea sólo de adopción (lo que no es merma alguna) y
como de esos 50 años, 30 han sido/son en Málaga, me considero “malagueño de
corazón”, pero todo, siempre y al mismo tiempo, y por encima de todo, me
considero “español”, y también “europeo”.
Mientras, los nacionalismos
son exclusivistas, provincialistas o regionalistas, de vuelo corto,
ombliguistas,…del terruño por el cual sacrificarían la vida.
Eso sí, después de inventarse
pasados felices inexistentes, históricamente desde tiempos lejanos, asiduamente
perseguidos por el Estado Central, con derechos adquiridos,…todo un artificio.
Tras morir Franco España
apareció ante el mundo como una gran incógnita.
¿Seguiría siendo la sin urnas
o la de urna cerrada, la del tricornio y el cura, la del botijo y las
castañuelas,…? ¿O se acercaría políticamente a los democráticos países
europeos, fueran monárquicos o republicanos?
Y, caminando-caminando por
esa senda ya podemos ver libros españoles en las librerías europeas, y las
salas de cine proyectan películas españolas y algún que otro Óscar ha caído en
nuestras manos, y algunos de nuestros cantantes no sólo no decepcionan sino que
son números unos en las listas europeas, y ¿qué decir de nuestros pintores?
Creo que España, hoy, detenta
una dignidad cultural en el mundo.
Pero lo que sí sabemos es que
el inglés es el lenguaje de la ciencia y de la tecnología, y no por Oxford y
Cambridge (aunque, también) sino, sobre todo, por lo norteamericanos, con
Universidades e Institutos tecnológicos cualitativamente supremos, pero tampoco
debemos olvidar que los americanos están hechos de pedazos europeos, como Frankenstein,
sobre todo irlandeses y británicos, es decir, que la cultura americana es un
popurrí de influencias europeas, y pasada por la turmis, sin contar con genios
indios, alemanes,..
Últimamente los hispanos, y
el castellano está invadiendo Estados Unidos.
La ideología política influye
en el auge de la cultura.
En España, en concreto, la
derecha española ha sido siempre muy pobre, se ha como enquistado en el tiempo
con el apoyo además de
La mayor parte de los
creadores han sido siempre de izquierdas o de centro-izquierda, progresistas.
Y es verdad que las derechas
siempre han sido, en España, bastante gritonas y bastante zarzueleras y la
cultura, más bien, debe tener siempre un elemento progresista y libertario,
rompedor, ensayando nuevos géneros y formas de comunicar los nuevos mensajes.
Pero nunca-nunca un comunismo
ortodoxo.
Incluso a otros niveles, los
fascistas de Mussolini o los nazis alemanes al menos representaban la
modernidad, eran movimientos modernos, negativos, pero modernos, mientras que
aquí, el fascismo fue esencialmente reaccionario y la derecha franquista era
clerical, reaccionaria, vaticana, gazmoña, represiva,…como más cavernaria.
La cultura, que debería ser
sólo cultura, cuando gobiernan las derechas dicen los de izquierda que se
resiente de dirigismo político.
Exactamente lo mismo que
dicen los de derechas cuando son las izquierdas las que están en el gobierno.
El mejor ministro de cultura,
pues, es aquel cuyos gustos personales se reflejen menos en la cultura general
del país, porque no sería bueno que sus preferencias resultaran demasiado
reflejadas o demasiado dirigidas.
El auténtico artista no tiene
que ser el querompa absolutamente y acabe con todo lo anterior, esa es un
proyección muy infantil.
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