LAS CONFESIONES
"PRIMERO DEBEMOS VIVIR....LUEGO PODREMOS FILOSOFAR"
Son, como todos sabemos, la
autobiografía de Aurelio Agustín, escrita tras haber pasado por el Maniqueísmo,
el Escepticismo Académico y el Neoplatonismo, que lo preparó para su
conversión, tras escuchar los sermones de San Ambrosio, Obispo de Milán y tras
los muchos rezos de su madre, Santa Mónica, para que se convirtiera y se
bautizara.
En Las Confesiones San agustín, además de sus vivencias antes de
su conversión, nos va mostrando su recorrido en su actitud espiritual
definitiva como un hombre frente a Dios, mostrando su posición de la razón
frente a la fe (“entender para creer y creer para entender”), su reconocimiento
de creatura frente a su Creador, de su consideración de pecador frente a su
Redentor.
Es en el Libro VII (sobre el
que trabajé en mi tesina) donde se nos muestra el camino: desde Fuera hasta
Adentro, para dar el salto al Arriba.
“Noli FORAS ire, redde te
ipsum, in INTERIORI homine habitat veritas et, post, TRANSCENDE te ipsum”
Desde el MUNDO hasta el YO
INTERIOR y desde éste a DIOS.
Las Confesiones es una obra
que consta de 13 libros.
Sin embargo, aunque en las
Obras Completas aparezcan los 13 libros, en las obras sueltas sólo aparecen los
10 primeros libros (como el que yo he usado y usando estoy, el de la Editorial Espasa
Calpe, Colección Austral, color verde) puesto que los tres últimos, en
realidad, no son parte de su biografía sino comentarios a los primeros versos
del Génesis, relativos a la creación del mundo por Dios
En estos 10 libros de sus
confesiones es donde aparece toda su peripecia vital, interior y exterior.
2.1. Argumentos sustantivos
de la tesis de Floria
Los argumentos con los cuales Floria sustenta su tesis (“La vida es breve”), realizan un hábil juego entre lo abstracto y lo biográfico.
Los argumentos con los cuales Floria sustenta su tesis (“La vida es breve”), realizan un hábil juego entre lo abstracto y lo biográfico.
Aurelio ha decidido no
rescatar la relación debido a que ama más su salvación que a Floria.
De este modo se destaca la
preferencia occidental por lo eterno y espiritual de quien el principal enemigo
a vencer es lo temporal y terreno.
Aurelio ha dejado atrás a
Floria para irse a los brazos de su verdadera esposa "Continencia".
Utilizando, pues, este
símbolo Floria argumenta la poca utilidad de recrearse en los brazos de la
eternidad eliminando el gusto por la vida presente.
Para poder realizar plenamente la legitimación de la brevedad de la vida, Floria va a partir de la reivindicación de lo femenino y de la mujer.
Para poder realizar plenamente la legitimación de la brevedad de la vida, Floria va a partir de la reivindicación de lo femenino y de la mujer.
Como ella misma recuerda,
según los platónicos y los maniqueos, la mujer no era digna de amistad, pues
amistad significa igualdad.
La mujer no es igual al varón,
es "Eva", el origen del mal, la causante de la perdición.
¿En qué consiste la perdición
para el agustinismo que ha desencarnado al cristianismo pasándolo por la
retícula del neoplatonismo?.
En estar atados a las cadenas
de este mundo, es la mujer como símbolo del mal la que le ha impedido al hombre
alcanzar la vida celestial provocándole a pasiones que lo amarran a la vida.
De este modo, si como Floria quiere demostrar, la inmediatez de la vida con toda su brevedad, gustos y placeres, realmente valen la pena para vivirlos como legítimamente humanos, entoncesla
Mujer como aquella que puede escribirle una carta al Gran
Hombre para que vuelva su mirada a lo cotidiano y a lo disfrutable en lugar de
los ideales y grandes proyectos utópicos, debe ser reconocida meritoriamente
por demostrar la brevedad de la vida.
3. Conclusión
Queremos señalar que Floria rehúsa presentarse a sí misma como la victima femenina de los abusos patriarcales.
De este modo, si como Floria quiere demostrar, la inmediatez de la vida con toda su brevedad, gustos y placeres, realmente valen la pena para vivirlos como legítimamente humanos, entonces
3. Conclusión
Queremos señalar que Floria rehúsa presentarse a sí misma como la victima femenina de los abusos patriarcales.
A lo largo de la epístola,
Floria se muestra como una mujer autorrealizada que no escribe para culpar a
Aurelio de los fracasos de su vida, antes bien intenta en todo momento hacer
que el hombre ponga los pies sobre la tierra e incluso en momentos se muestra
como una terapeuta que está dispuesta a auxiliar a quien considera se encuentra
padeciendo una terrible enfermedad: la imposibilidad de disfrutar la brevedad
de la vida.
Claro que el autor es un varón, y hace jugar a los valores contemporáneos de género y sexualidad, mezclado con los entramados teológicos del agustinismo.
Claro que el autor es un varón, y hace jugar a los valores contemporáneos de género y sexualidad, mezclado con los entramados teológicos del agustinismo.
Resalta el carácter
terapéutico de una mujer que intenta devolver la cordura a un hombre para que
pueda disfrutar la vida, lo que queremos señalar como la principal aportación
de Floria, demostrar que los moralismos que todavía pesan como lastre en
algunos sectores pueden ser derribados a partir de su misma tradición.
La carta es una versión
alternativa de lo que puede ser la historia si se presta más atención a la
tierra que al cielo, a la vida que a la filosofía, porque ella lo dice muy
bien:
“Primero debemos vivir, y
luego… luego podremos filosofar.”
No hay comentarios:
Publicar un comentario