UNA ÉTICA MUNDIAL.
“PROYECTO DE UNA ÉTICA
MUNDIAL” es el título de la obra de Hans Küng.
“Imposible sobrevivir sin una
ética mundial. Imposible la paz mundial sin la paz religiosa. Imposible la paz
religiosa sin diálogo de religiones”.
¿Cómo pueden contribuir las
grandes religiones al establecimiento de una ética cosmopolita?
El único camino ecuménico
entre el fanatismo religioso y el olvido de la verdad religiosa es el camino
del diálogo entre las diferentes religiones.
Pero –digo yo – si “mal riñen
dos si uno no quiere”, nunca podrá haber diálogo entre religiones si cada una
de ellas cree ser la “única religión verdadera”.
O son monólogos paralelos o
no hay un auténtico diálogo si todos no renuncian a la defensa de la suya y
bajan al campo neutral, al “terreno de nadie”, a lo que Russell denominaba “No
man´s land”, que es el terreno de la razón.
EL BARÓN DE MÜNCHHAUSSEN.
El barón de Münchhausen se
hunde con su caballo en una ciénaga.
“Habría muerto
irremisiblemente si la fuerza de mi brazo, asiendo mi propia coleta, no me
hubiese sacado de allí, juntamente con el caballo, que yo apretaba firmemente
entre mis rodillas”
“Dadme un punto de apoyo y
moveré la tierra” –había dicho el científico.
Pero si no hay punto de
apoyo, si uno ya no hace pie en este mundo, ¿cómo moverse? , ¿Cómo ver el mundo
desde fuera con “nuevos ojos”?
Hay “estilos de vida”, formas
de ser y de comportarse, creencias incrustadas que impiden, no sólo a individuos
concretos, sino a pueblos enteros, a sistemas enteros de relaciones humanas,
que impiden ver posibilidades alternativas.
Sólo reconstruyéndolas y
desde esa nueva perspectiva, una vez desvanecidas las imágenes anticuadas del
mundo y del hombre podrán divisarse “realidades nuevas”.
Desde el 711 hasta el 1.492,
con la toma de Granada por los Reyes Católicos.
Más de 7 siglos de presencia
musulmana en tierras ibéricas, siglos marcados con el sello de una brillante
civilización.
Desde los soberanos omeyas de
Córdoba a los reyes de taifas y a los sultanes nazaríes de Granada va
consolidándose un aparato estatal al tiempo que las actividades bélicas de
al-Andalus frente a los estados cristianos del norte de la península.
Se respira una atmósfera
humana en esa España musulmana a través de las estructuras sociales y
económicas desconocidas en la
España cristiana,
La población musulmana, el
hábitat urbano y rural, el artesanado, la moneda, el comercio, la evolución de
la vida cotidiana y de la vida religiosa, el florecimiento cultural, filosófico
y científico, que tanta trascendencia tuvo en el decurso de Europa.
Se narra en este tercer
volumen de la Historia
de España, dirigida por Tuñón de Lara y
analizado por la profesora Arié Rachel.
No hay comentarios:
Publicar un comentario