FLORILEGIO 13 ( 2 ) VARIOS

FILOSOFAR.

Filosofar es llegar a poner en contacto lo que sabemos con lo que sentimos, lo que pensamos con lo que hacemos.

Es desconfiar de las explicaciones que satisfacen; arriesgarse, a menudo, a ver más, o menos, de lo que quisiéramos ver.

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FILOSOFÍA Y SOCIEDAD.

Es el título del libro de Jerez Mir., editorial Ayuso. Madrid.

Es un acercamiento a la Historia de la Filosofía PERO desde, o sobre, el trasfondo social y económico en que la Filosofía fue gestada.

Y no cabe duda de que existe una interrelación entre las ideas de una época y las condiciones sociales y económicas vigentes en ella.

Me gustó y siempre me gustará por ser una Historia de la Filosofía totalmente diferente.

Se ve cómo surge, sobre ese suelo económico y social, una u otra filosofía, pero siempre relacionados.

Invito al lector a leerlo.

Le aseguro que lo disfrutará.

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EVOLUCIÓN CULTURAL: SABER Y SABER OBRAR, CONOCER Y SER.

Cuando hemos sido pillados en paños menores por una pandemia que fue, durante muchos días, confundida con la gripe que anualmente nos visitaba porque los síntomas eran, poco más o menos, los mismos pero que era un maldito virus que nadie sabía la forma de atacarle y empezó a sembrarnos nuestra España, y a casi a toda Europa, de cadáveres  en proporción aritmética y, a veces, hasta simétrica, comenzamos a actuar, imitando a Italia, con una cuarentena de confinamiento (con lo que ello supone, sobre todo para la vitalidad infantil) y de la que llevamos más de un mes, hubo un país europeo, Inglaterra, cuyo Presidente, Boris Johnson, apostó por la “selección natural”, no tomar medida alguna y dejar que el virus ataque a todos y los “mejor dotados” sobrevivirían quedando inmunizados.

Pero hasta él fue atacado por el virus, tuvo que ingresar en el hospital y, como todos los países europeos, se decidió por la “evolución cultural”, abandonando la barbaridad, en el siglo XXI, de dejar actuar a la “evolución natural”.

Lo mismo ocurrió con EE.UU. que se encuentra en un desastre sanitario, acompañado de otro no menos brutal que no ataca matando sino mandándolos al paro, además de no poder acudir a la sanidad pública porque prescindió de ella, privatizándola.

La humanidad comenzó a mejorar cuando la “evolución cultural” entró en nuestras vidas y supimos como prever o matar a la bacteria que intentara atacarnos, con medicina, con cirugía, con vacunas, con confinamientos, con antitérmicos, etc…etc…

Las dos líneas-fuerza de la “evolución cultural” en Occidente, ya desde los albores de la Modernidad, han sido “el conocimiento de la realidad mundana” y la exigencia de un “progreso moral” que hiciera posible la libertad del hombre.

Pero estas dos líneas-fuerza no han dejado de chocar y mostrar resistencias a su complementación, por lo que buena parte de los esfuerzos del pensamiento y la praxis se han orientado a intentar conjugar estas dos instancias.

La acción es el lugar de encuentro de las dos instancias: conocer más para hacer más y mejor y obrar bien, progresar, para ser mejores.

NIETZSCHE: Y SI…

¿Y si interpretamos la Voluntad de Poder, no como “voluntad de dominio” tecno-racional del mundo por parte del sujeto moderno, sino como “amor”, “voluntad de amor, de amar”?

Sería una nueva perspectiva en la comprensión de su obra.

Entonces, el auténtico Nietzsche no habría tenido nada que ver con la explotación de su pensamiento por el nazismo, en el que el amor era un amor mutilado, solamente a su raza, con el odio a la raza judía incrustado en su corazón, no sólo de sus líderes políticos sino en el pueblo alemán.

Ellos fueron, también, los grandes odiadotes que cometieron y ayudaron a cometer el intento de exterminar a todo un pueblo.

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PITÁGORAS.

Apenas mencionar su nombre se nos hace presente un teorema matemático: “En un triángulo rectángulo, el cuadrado de la hipotenusa es igual a la suma del cuadrado de los catetos”

Pero Pitágoras fue mucho más que un matemático en su vida y en su obra.

Su labor creadora se extendió, desde el campo religioso al campo de la política, desde el campo de la filosofía al campo de la ciencia.

En efecto, fue el fundador de una escuela del pensamiento filosófico que le corresponde tanto a él como a su escuela, el pitagorismo.

Igualmente fue un reformador social que creía en la igualdad de todos los hombres (“cosmopolitismo”), que odiaba la injusticia y que admitía enre sus seguidores a varones y a mujeres, en unos tiempos en que la mujer era considerada casi no un ser humano.

FERRATER MORA.

Dice Ferrater Mora que los “grupos ontológicos” son tres: realidades físicas – personas – objetivaciones, pero los niveles son cuatro: “físico”, “orgánico”, “social” y “cultural” y tenemos tres continuos: el “físico-orgánico”, el “orgánico-social” y el “social-cultural”.

Todas las entidades están fuertemente relacionadas, otorgando un papel central a la realidad física, por lo que estamos ante un “materialismo emergentista”, pero no reduccionista.

El ser humano que habita este mundo lo transforma con la acción desde su condición de ser natural, ampliando el horizonte de la realidad con sus productos culturales.

Cuando dicha acción, eminentemente social, se estructura en función de los fines más altos, como la vida, la libertad, la igualdad, la justicia,…la acción humana adquiere un rango moral.

EDUCACIÓN CÍVICA.

Aunque debe admitirse que toda la vida escolar debe tener preocupación moral y tender al desarrollo del autodominio y que dicha preocupación debe ser transversal, en todas las materias del currículum, también es verdad que hay formas de acción directa, y nada despreciables, como crear una asignatura expresamente creada para ello.

El tipo de hombres (varones y mujeres) que deseamos para nuestra sociedad democrática, avanzada y moderna, aconseja no dejar la formación cívico-ética de los futuros ciudadanos en manos de los crecientes y poderosos medios de comunicación social, que bombardean cotidianamente, con informaciones mediadas por los poderes económicos, que buscan lo que buscan (eso que todos sabemos aunque disfracen su objetivo).

Por tanto es imprescindible crear una materia sólidamente establecida que incida en la formación de los estudiantes como ciudadanos del futuro, y no sólo consumidores, responsables de su vida y partícipes de la comunidad social.

No puede faltar en ella la reflexión crítica que les lleve a construir conductas autónomas, desde el conocimiento y la asunción de la convencionalidad, en cuyas instituciones se han ido plasmando históricamente los valores.

No basta con formar hombres técnicos, al mismo tiempo hay que proporcionarles los medios para que se edifiquen a sí mismos.

Por lo tanto, “transversalidad” en la Educación Primaria, pero “especificad” ya en la ESO.

Obligatoria para TODOS los alumnos (y no como alternativa a otra materia), con espacio, tiempo y horario adecuado, con currículo propio y específico, con profesorado especializado para impartirla, que recaerá en el Departamento de Filosofía y en el Área de Ciencias Sociales.

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BRAVO MURILLO.

Este nombre siempre se me aparecía como una calle muy larga de Madrid y que había sido un político.

Leo que llegó a ocupar varias y variadas carteras ministeriales.

Pero lo que no tenía ni idea es que fuera el autor de: ¿“Que yo autorice una escuela a la que asistan seiscientos o más hombres del pueblo? No, en mis días. Aquí no necesitamos hombres que piensen, sino bueyes que trabajen”.

Recordaré este pensamiento siempre que viaje a Madrid y pasee por “su” calle, pero se me ha caído de las manos.

Si esta frase fue suya (que supongo que sí) su valía como político se ha devaluado tanto, tanto que…no merece la pena seguir escribiendo más sobre él.