Se sabe, a ciencia cierta,
que nació en Palestina y murió, crucificado, en Jerusalén.
De lo demás, alguna
probabilidad o verosimilitud, pero no certeza absoluta.
Algún rastro hay en los tres
evangelios pero lo que más ha inspirado a los artistas han sido hechos o
anécdotas expuestos en los evangelios apócrifos.
Ya hemos expuesto,
anteriormente, que NO SE SABE ni CUÁNDO ni DÓNDE nació.
NO el año.
El monje Dionisio el Exiguo
(el pequeño, bajito, enano) en el siglo IV nos la jugó bien jugada al
equivocarse al pasar del calendario romano al calendario cristiano, al querer
hacer coincidir el año 0 con el nacimiento de Jesús.
NO el día (25 de Diciembre)
(los pastores al raso de la noche)
Y es que, teniendo la Iglesia que escoger una
fecha, se decidió por la que era la Festividad del Sol, que coincidía con la del
nacimiento del dios pagano Mitra.
NO el lugar. Mejor Nazaret
que Belén (Mateo y Lucas, porque Marcos y Juan ni mencionan su nacimiento)
¿Por qué lo de Belén? Por la
intención de hacer coincidir el nacimiento del Mesías con la profecía del
profeta Miqueas (“Y tú, Belén Éfreta, la más pequeña entre los clanes de Judá,
de ti me saldrá el que me ha de reinar en Israel” (que también lo cita Mateo)
Pero luego, Mateo habla de
las iras del rey Herodes, que ordena la matanza de los inocentes (lo que ignora
Lucas) mientras éste habla de un decreto de César Augusto para empadronarse,
por lo que sus padres…. (Lo que ignora Mateo).
Pero es que “históricamente,
nunca se celebró un censo general en tiempos de Augusto”
Además de que el censo se
realizaba con fines fiscales, y empadronar a la gente en un lugar que no fuera
el de su trabajo habría supuesto una verdadera pesadilla para la burocracia.
Además, nunca se le llama
“Jesús de Belén”, sino “Jesús de Nazaret” o “nazareno”, nombrados,
habitualmente, por el lugar del nacimiento o por el nombre del padre (sería
“Jesús de José”) pero que nunca se le nombra así, porque los evangelistas nunca
dieron importancia a San José, a quien pintan, más bien, como a un viejo, pero
que le dan mucha importancia a María, virgen antes de y después del parto.
Se habla de Jesús cuando
nació, cuando a los 12 años se separa de sus padres en una visita al templo de
Jerusalén, al que encuentran a los tres días, discutiendo con los doctores de
la ley y, finalmente, a los 30 años, cuando comienza su vida pública.
De lo que hiciera o dejara de
hacer Jesús en esos casi 20 años sólo hablan los evangelios apócrifos. Sólo hay
hipótesis, y algunas absurdas.
¿TUVO HERMANOS Y HERMANAS?
Parece cierto que tuvo 4
hermanos: Santiago, José, Judas y Simón (según el evangelio de Marcos); y
probablemente hermanas, pero nada se dice de ellas porque, en aquellos tiempos,
la mujer (y sus hermanas lo eran) nada contaban en la vida familiar y social.
Pero si María fue virgen
antes de y después del parto…. ¿cómo podía tener hermanos y hermanas?.
Los protestantes no tienen
problema, lo admiten. No así los católicos que recurren al truco de decir que
cuando Marcos habla de “hermanos” está refiriéndose a “primos”.
Pero “adelfoi”, en griego, en
que está escrito el evangelio, significa “hermanos”
Otra hipótesis barajada es
que fueran “hermanastros” y que José fuera un viudo y hubiera tenido hijos en
su anterior matrimonio.
Hoy se admite que de
“virginidad” nada, sino una mujer normal y que “el parto virginal” es
antiquísimo, se encuentra en muchas religiones porque se interpretaba (nacer de
una virgen) que el nacido iba a ser un personaje muy importante.
Y si Jesús era el Mesías tenía
que haber nacido de una mujer virgen.
¿TRABAJÓ COMO CARPINTERO O
COMO PEÓN DE ALBAÑIL (durante los años oscuros)?
Se dice que trabajaba en el
oficio de su padre, pero no se nos dice en qué trabajaba su padre, si
carpintero u obrero de la construcción, un trabajo inferior, y en un pueblo,
Nazaret, que ni aparece en los mapas de entonces.
¿”Puede salir algo bueno de
Nazaret”? –preguntaban sus contrincantes.
Flavio Josefo, el
historiador, responsable de las actividades militares de aquella zona, durante
la guerra de los judíos, cita 45 ciudades de Galilea, pero nada dice de
Nazaret.
Y en el Talmud aparecen 65
ciudades de Galilea, y tampoco aparece Nazaret.
Nada, pues, se sabe de
Nazaret.
Debió ser una aldea agrícola,
no lejos de una ciudad importante, Séforis.
Por lo que se destaca que
Jesús pudo tener contacto con otras ciudades y no estar encerrado en Nazaret.
¿SABÍA LEER Y ESCRIBIR?
Nada sabemos. Seguramente sí
sabría. Sólo se sabe cuando garabateó, con el dedo, sobre el polvo de una losa
en el templo, en el episodio de la mujer adúltera.
Debía de conocer bien las
Escrituras y la literatura rabínica, por lo que podría discutir con los
sacerdotes del templo, los fariseos y los saduceos sobre la interpretación de la Biblia.
Su lengua era un dialecto del
arameo, el mismo que hablaba Pedro. “Habla igual que Él” (en la escena del
prendimiento).
Debía de conocer el arameo y
el hebreo, y quizá hasta un poco de griego y de latín. Pero, con certeza nada
se sabe.
¿Tantos años sólo trabajando
y sin leer y sin estudiar? Es por lo que se dice que pudo haber viajado fuera
de Palestina, habiendo estado en contacto con otras religiones y filosofías de
su tiempo, incluso que hubiese sido iniciado en las artes de la Magia en Egipto. De ahí su
mente tan abierta.
¿ESTUVO CASADO?
¿Cuánto duró su “vida
pública”?. Según los sinópticos poco más de un año y enseguida lo
crucificarían. Pero según Juan, en el 4º evangelio, duró tres años, pues habla
de tres fiestas de Pascua transcurridas con los discípulos.
Más preocupados, pues, por
las enseñanzas que por el tiempo y el lugar.
En sus relaciones con las
mujeres siempre defendió a las prostitutas contra los puritanos y rompió todos
los esquemas y tabúes en sus relaciones con las mujeres.
Pero habría sido algo
insólito que no se hubiera casado porque, entre los judíos, el que un hombre no
estuviera casado, formara una familia y tener descendencia, era algo anormal.
Todos querían ser progenitores del futuro Mesías.
¿CÓMO ERA FÍSICAMENTE?
Los primeros cristianos,
influidos por su origen judío, no tenían imágenes ni pinturas de Jesús. Estaba
prohibido reproducir su rostro, por eso se le representaba con símbolos (un
pez, un cordero, un pastor,…), nunca con imágenes.
Pero ¿y la famosa Sábana
Santa de Turín?
Es un lienzo de 4,36 metros por 1,1.
Presenta dos imágenes del mismo hombre, de tamaño natural, una de cara y otra
de espalda. Tiene la marca de los crucificados, mide 1,81 metros de altura y
debía pesar unos 77 kilos. Tiene bigotes y barba larga y en las manchas de
sangre se han descubierto restos de hemoglobina.
Las heridas de la cabeza
hacen pensar en un casco hecho de espinas. Presenta heridas en las manos, en
los pies y en la parte izquierda del costado. Y no hay, en la tela, pintura
alguna, según los exámenes químicos.
Sería, pues, la imagen de un
crucificado.
Pero, ¿de qué fecha?
Los primeros análisis del o
al carbono 14 parecía que el lienzo no era más antiguo de la
Edad Media.
Pero, en 1.993, tras la
convocatoria, en Roma, de científicos internacionales, se llegó a la conclusión
de que la Sábana Santa
pertenecía a la época en que vivió Jesús.
Se podía demostrar cómo se
crucificaba, entonces, a los revoltosos políticos.
Pero la pregunta seguía ahí:
¿La imagen de aquel cuerpo pertenecía a Jesús de Nazaret?
La otra reliquia, la del
“lienzo de la Verónica ”,
ni siquiera la Iglesia
la considera con valor, al aparecer sólo en los evangelios apócrifos.
Unas veces se pinta a Jesús
glorioso (en época romana), otras como un Jesús sufriente (en la
Edad Media ) o un Jesús resucitado.
Fueron inventándose las
caras, a lo largo de la historia.
Nunca sabremos cómo era.
¿ERA ALTO/BAJO, BELLO/FEO?
Como judío no tendría el pelo
rubio ni los ojos azules. Pero aunque no todos los judíos son iguales, no
sabemos cómo sería.
Sólo hay una escena (que la
cuenta Lucas) en que habla del publicano Zaqueo que, “como era bajo, no podía
verlo, rodeado de gente como iba, y se subió a un árbol”.
¿Quién era el bajo, Zaqueo o
Jesús?
Usaba una túnica, no de seda,
sino de lino o algodón, que llevaba sandalias, que aparentaba más años de los
que tenía (“aún no ha cumplido los 50 años” –decían los judíos, cuando, en
realidad, no tendría más de 30, que no destacaba en nada especial (Judas, para
identificárselo a los romanos le dio un beso (“el beso de Judas”)
¿Sería feo, como dice Isaías,
hablando del Mesías, “no hay hermosura en Él, lo veremos, más bien sin
atractivo”?. San Justino dice que “era casi deforme, Tertuliano afirma que su
cuerpo casi no parecía el de un hombre, de lo feo que era,…
¿Sería bello, como dice el
Salmo 45: “eres el más hermoso de los hijos de los hombres; la gracia se
derramó en tus labios; Dios te ha bendecido para siempre”? Y también los hay
defensores de su hermosura.
¿La realidad? Que no se sabe.
Que si era un judío normal, sería moreno y no rubio, no muy alto,…
Pero….suposiciones.
¿CÓMO FUERON SUS ÚLTIMAS
HORAS Y CÓMO MURIÓ?
Aparece mucha información en
los 4 evangelios, pero muchas contradicciones y divergencia entre ellos.
¿Quién decretó que debía
morir: las autoridades judías o las romanas?
¿Las acusaciones que se le
imputaron eran religiosas o políticas?
Porque si eran religiosas,
como parece ser, pues presentaba una revisión de la religión judía ¿por qué no
se le mató con lapidación, como era lo normal en estos casos, sino con la
crucifixión, reservada a los sediciosos políticos?
¿Entre su detención y su
muerte transcurrió un día o varios, incluso meses?
¿Hubo algún testigo ocular
del proceso ante el Sanedrín y ante Pilatos?
¿Por qué se extrañaron de que
hubiera muerto tan rápido, ya que a veces duraban varios días?
¿Existe la posibilidad de que
fuera descolgado de la cruz, todavía vivo, que se recuperara y que viajara por la India , como algunos, sin
prueba, afirman?
¿Conocemos cuáles fueron sus
últimas palabras en la cruz, antes de morir?
¿Es verdad que ocurrieron
fenómenos extraños?
¿Resucitó, realmente, o eso
es sólo pura creencia?
¿Por qué los apóstoles
pasaron del miedo y esconderse a la euforia desbordada, hasta llegar a ser
acusados de estar borrachos?
¿Dejarse matar, por defender
su fe, fue una conversión, una transformación de tipo místico?
La razón y la historia poco o
nada pueden decir de todo esto. Entra, de lleno, en el terreno del Jesús de la
fe o el Cristo.
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