María en los Evangelios
Apócrifos.
Son casi 100 los Evangelios
Apócrifos y en ellos se habla más de María y de José que en los sinópticos y
teniendo en cuenta que algunos de los apócrifos son anteriores a los
sinópticos.
Se sabe de muchos de ellos
porque son citados por los Padres de la Iglesia , porque fueron quemados o mandados
quemar.
Sólo un pequeño número de
ellos han llegado hasta nosotros por las traducciones que de ellos se habían
hecho en griego, copto y latín.
“Apócrifo” significa
“oculto”, “secreto”, nada que ver con “falsos” significado con el que, después,
se les designó.
Son documentos literarios,
fantasiosos más que fantásticos, muchas veces parecen cuentos para niños y que
mezclan algo seguramente histórico con invenciones de tipo mágico.
Son espontáneos y nada
teológicos.
Fueron, en un principio,
considerados auténticos y aparecen citados por los Padres de la Iglesia en igualdad con
los cuatro que después serían…
Y seguramente influyeron en
Mateo y Lucas en lo referente al nacimiento de Jesús de una virgen llamada
María y en lo referente a la infancia de Jesús.
¿Joaquín y Ana?
¿Los Reyes Magos y sus
nombres?
¿Virginidad perpetua de María
(antes de, en y después de)? Fue, desde el principio, motivo de polémica y,
sobre todo, aparece en el Protoevangelio de Santiago (de autor desconocido),
pero asignado a Santiago el Menor, el hijo del Zebedeo y es uno de los más
antiguo, anterior a los cuatro oficiales.
Nos ha llegado en griego,
aunque seguramente existió una versión hebraica.
Es el más citado por los
Padres de la Iglesia ,
por lo tanto considerado muy importante y es en el que más se habla de María.
Se dice que sus padres
Joaquín y Ana eran estériles, que María fue educada en el Templo, del que salió
cuando le apareció, por primera vez, la regla o período… y los sacerdotes le
buscaron marido….que no entendía la misión de su hijo….
Es en este apócrifo en el que
dice que José, cuando se casó, era viudo y anciano….y tenía 4 hijos (José o
Josetos, Judas, Simón y Santiago) y dos hijas (Ligia o Lisia y Lidia),…
Pero también en los
evangelios canónicos se afirma que Jesús tuvo hermanos y hermanas.
Inmediatamente muchos
teólogos y biblistas acudieron al Protoevangelio (apócrifo) para afirmar que
podría tratarse de hijos de un matrimonio anterior de José.
Todo con tal de no aceptar
que Jesús hubiera podido tener hermanos de sangre pues, en ese supuesto, lo de
“virgen antes de – en – después del parto”, sin haber tenido relaciones
sexuales con hombre alguno…
En el Protoevangelio aparece
la historia de la partera.
El Protoevangelio tiene tres
partes: la segunda la pone en boca de José y la cuenta él, cuando fue en busca
de una partera y cuando llegaron al portal ella se maravilló de que el niño
estuviera ya mamando, lo que consideró un milagro.
Al salir la partera se
encontró con Salomé a la que le contó la historia de lo que acababa de pasarle,
pero no se lo creyó, diciendo: “sólo si toco con mis dedos y examino la
“naturaleza” de María…dio un grito y sacó la mano carbonizada.
Imploró a Dios para que…y se
le apareció un ángel que le dijo que tomara al niño recién nacido en sus brazos
y recibiría alegría y placer y, al momento, se sintió curada.
El primer milagro ¿de María o
de Jesús?
Mientras en los cuatro
evangelios se habla de Jesús y, si viniese al caso, de “la madre de Jesús” para
probar su mesianidad o divinidad, pero nunca de ella directamente, en los
Apócrifos sí se habla de ella por sí misma.
Los apócrifos tenían como
misión rellenar la laguna de noticias sobre los personajes más importantes de
la vida de Jesús, de su infancia, de su madre y de su padre, de lo que apenas
nada dicen los canónicos, que son más teológicos.
Quizá los autores de los
mismos inventaron muchas cosas ante la curiosidad de las comunidades cristianas
pero ¿qué decir de los milagros de convertir el agua en vino, caminar sobre las
aguas, resucitar a Lázaro,…?. Son milagros mágicos, creaciones literarias para
demostrar su divinidad.
Quizá no todo sea inventado,
pero lo cierto es que no todo es verdad.
Quizá en los Apócrifos, como
en los Canónicos estén mezclados hechos históricos, recogidos de la tradición
oral con otros creados para rellenar el vacío oficial sobre María, sobre José y sobre la infancia
de Jesús.
Pero mucho de
lo que aparece en los Apócrifos aparece también en los Canónicos.
Como
considerar loco a Jesús su propia familia, o los problemas de José en aceptar a
María embarazada cuando aún no había tenido relaciones sexuales con ella.
Un tema
exclusivamente apócrifo, de los siglos II y III, es el de la muerte y asunción
de María a los cielos, de lo que nada dicen los canónicos. Incluso se afirma
que, advertidos milagrosamente por Dios, los 12 apóstoles, que aún vivían,
acudieron a Jerusalén (en el Apócrifo de la Asunción )
Desde que
aparece Jesús en su vida pública María ya no cuenta casi nada en los evangelios
sinópticos (sólo Juan la ubica/coloca a los pies de la cruz) y sobre la
posterior vida de María sólo se preocupan y aparece en los apócrifos.
¿Son todos
los apócrifos historias inventadas para paliar el silencio de los canónicos,
para rellenar ese vacío ante las preguntas de las primeras comunidades
cristianas?
Esa es mi duda y mi pregunta.
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