Gracias a la edad (ellas son madres y yo abuelo casi por 3ª
vez) he dejado de padecer “el síndrome de la llave en la puerta”.
De un oído en el móvil y el otro en el ruido del abrir de la
puerta, con el corazón en un puño he pasado a desentenderme de todo eso.
La hora de sus llegadas coincidía con la de mi levantada.
Nos dábamos los “buenos días” y cada uno a lo suyo. A dormir ellas. A
leer/escribir/corregir exámenes/Mercadona…. Yo.
Su descanso exigía mi silencio matutino y su hora de levantarse
coincidía con mi hora de acostarme la siesta (como buen andaluz).
¿Ventajas?. Desayuno ahorrado.
¿Desventajas?. Envejecimiento cardíaco por presión
psicológica.
Lo que digo. La EDAD. La suya y la mía.
Estoy hablando de MADRID ARENA y la madre que parió al
Halloween, como si todo hubiera sido la venganza del tradicional D. Juan
Tenorio y el “no es verdad, paloma mía…….
Cuantos recuerdos de D. Juan Tenorio. Creo que soy una de las últimas generaciones que llegaron a verlo por televisión. jejeje...
ResponderEliminar¡Saludos!