Mi Presidente estrenó Su Presidencia, trayendo las tropas de Irak y va a marcharse dejándonos las tropas (más tropas) en Libia.
Mi Presidente parece que se ha dado, a sí mismo, la vuelta como a un calcetín. Antes era “Pacifista” a ultranza y se me ha convertido en “belicista” ocasional.
Ha perdido su adanismo en el que vivía o creía vivir o creía que se podía vivir y se me ha convertido en prosaico, en un aliado de las fuerzas del mal, colonialistas, explotadoras, ….
Es lo que tiene el poder, que aunque se diga que “a mí no me va a cambiar”, sí te va a cambiar, en cuanto se entra en la cruda, fría y difícil realidad, que hay que estar también a las duras, no sólo a las maduras.
Ya sé que D. José Blanco me ha dicho que “nuestras tropas no han ido a la guerra, sino a conseguir la paz”, por eso hemos mandado no sé cuantas tropas y un par de F-18, para tirar chocolatinas desde el aire. ¡Hay que ver las tonterías que a uno le obliga a decir el puesto que ocupa¡.
Uno ya no sabe si el tonto es él, que cree que los demás somos tontos y nos lo vamos a creer, o hay mucha gente tonta que se lo cree, a tenor de las pocas manifestaciones del “NO a la guerra” por los hasta ahora pancartistas. A no ser que hayan roto las pancartas ante la nueva situación.
Tengo dudas cartesianas:
1.- ¿Estamos en la guerra en Libia por motivos humanitarios, ya que un loco anda suelto y está masacrando a su pueblo?
2.- ¿Estamos por motivos económicos (llámese petróleo)?
3.- ¿Estamos de palmeros y acompañantes de Sarkozí y Cameron, para que no nos echen del club?.
Por que si es por lo 1º (y no por lo 2º, que era el “asqueroso objetivo” de la guerra de Irak), cuando terminemos con el dictador Gadafi habrá que seguir con el Rey de Marruecos, genocida del pueblo saharaui. Luego tendremos que seguir con los Emires del Golfo, unos tiranos medievales. De aquí debemos pasar a la Monarquía Saudí, la más corrupta y antidemocrática del mundo y que, además, acaba de ocupar, con su ejército, Bahrein.
Y, ya puestos, al amigo de la Alianza de Civilizaciones, el de Irán, de nombre impronunciable, que éste sí que puede ser peligroso, al disponer de armamento nuclear, y éste, en nombre de Dios es capaz de….
Pero, ya que estamos aquí, ¿Es que Sadam Husseim no masacró a los kurdos y a los chiíes?. ¿Éstos no merecían, también, ser “objetivo humanitario”?.
Y otra duda cartesiana: Si las resoluciones de la O.N.U. nunca OBLIGAN, sino que sólo AUTORIZAN, ¿Por qué estamos en esta guerra y no pudimos estar en la otra?.
¡Mal pensado que es uno¡.
Defecto profesional
No hay comentarios:
Publicar un comentario